"Dios está acá para siempre", afirmó el nuevo sacerdote salesiano

  • 25 de noviembre, 2021
  • Bahía Blanca (Buenos Aires) (AICA)
El arzobispo de Bahía Blanca, monseñor Carlos Alfonso Azpiroz Costa OP, ordenó sacerdote al salesiano Emiliano Velasco, el 20 de noviembre en la parroquia San Juan Bosco, de la Casa Salesiana "La Pied

El sábado 20 de noviembre el arzobispo de Bahía Blanca, monseñor Carlos Azpiroz Costa OP, ordenó sacerdote al diácono salesiano Emiliano Velasco. La celebración tuvo lugar en la parroquia San Juan Bosco, de la Casa Salesiana “La Piedad” de Bahía Blanca, y contó con la presencia de jóvenes amigos, familiares y salesianos de la Inspectoría Ceferino Namuncurá (Argentina Sur). 

Tras el rito de ordenación, el inspector salesiano padre Darío Perera, agradeció "al arzobispo Carlos porque siempre nos acompaña con mucha cercanía y calidad de pastor; a la comunidad de Emaús que preparó esta celebración; y a la parroquia San Juan Bosco”.

“Quiero agradecer de forma especial a la familia de Emiliano. Don Bosco decía que cuando una familia entrega a un hijo a la congregación, María Auxiliadora va a protegerla de manera especial”.

Finalmente, el padre inspector se dirigió a Emiliano: “Quiero desearte que tu ministerio esté siempre al servicio de los jóvenes, y de los jóvenes más pobres, y que en nuestra comunidad inspectorial seas muy feliz como sacerdote”.

Seguidamente el neosacerdote se acercó hasta el altar para dar su primer mensaje, en el que agradeció a su familia, a su comunidad religiosa, a los jóvenes y a sus hermanos salesianos.

“Hubo un tiempo en que no sabía si ordenarme. Yo temía que mis pobrezas y mis sombras se vieran aumentadas al ser el ‘padrecito’. Durante muchos años esperé porque me asustaban algunos modelos de hermanos. Pero yo no iba a ser mejor que nadie”, admitió. Y continuó: “Pero Willy Tanos, Renzo Adami y Carlitos Pomar -sus hermanos de comunidad en la Casa Emaús de Bahía Blanca- me mostraron que se puede ser cura de otra forma. Fueron ejemplos vivos de que cuando dicen ‘acá estoy’ tienen mucho para dar. A ellos quiero agradecerles de corazón por poner su don al servicio y así entusiasmarnos a otros a poner el don al servicio de los demás”, valoró.

Por otra parte, agradeció a su familia: “especialmente quiero agradecer a dos personas que son mi soporte en mi familia: Gonza y Rodri, mis hermanos”. 

Finalmente, explicó que antes de ordenarse estuvo de retiro, y allí meditó sobre el “Acá estoy” de Dios (su lema sacerdotal). “Encontré un texto del Éxodo que nunca había leído: el pueblo le pregunta a Moisés, ¿pero Dios está realmente con nosotros?”

Y concluyó: “Yo estoy convencido de que Dios está acá para siempre. Dios está acá para siempre, eso es lo que creo”.+