El proyecto "Buen Samaritano" brinda ayuda social, legal, y espiritual

  • 25 de noviembre, 2021
  • Buenos Aires (AICA)
El convento franciscano de Buenos Aires organiza un sistema de acompañamiento integral con voluntarios que entregan viandas. Una trabajadora social y una abogada acompañan legal y social.

El proyecto “Buen Samaritano”, que busca acompañar a personas en situación de calle, atiende a distintas necesidades que se les presentan en el centro de la Ciudad de Buenos Aires. La iniciativa social es impulsada por la Provincia Franciscana de la Asunción.

En un informe presentado por los frailes registran de la ayuda brindada desde mayo de 2021 hasta noviembre.

En estos meses, la trabajadora social atendió a 80 personas que se acercaron por consultas vinculadas con situaciones personales o sociales, requerimiento de asesoramiento, orientación y principalmente, de escucha. En su mayoría son adultos jóvenes con de entre 25 y 45 años que se encuentran en situación de calle o en riesgo de quedar en situación de calle. Las principales temáticas tienen que ver con la tramitación de subsidios, acceso a vivienda, gestión de turnos, emisión de cartas de pobreza para tramitar documentación, acceso a salud y educación.

Además, se puso al servicio una abogada que atiende una vez por semana y que ya recibió 70 consultas. Las problemáticas que se le presentan tienen que ver con regularización migratoria, estado de situaciones de causas penales, órdenes de desalojo, acceso a viviendas, pago de infracciones y deudas, o gestión de casos penales y civiles.

Los frailes y los voluntarios entregan todos los viernes unas 200 viandas. Las personas en situación de calle se acercan al convento y reciben bandejas con alimentos cocinados que llevan para comer junto con sus familias. Cada viernes unas 70 personas llevan bandejas también para quien se quedó en la calle cuidando de sus pertenencias. 

El acompañante pedagógico está atento a las personas en situación de vulnerabilidad cuando se acercan al convento los viernes, brindando un espacio de escucha y coordinando la logística de entrega de alimentos y ropa junto con el grupo voluntario y los hermanos franciscanos.

La mayoría de las personas que se acercan son hombres que presentan varios padecimientos, como consumos de sustancias, desempleo, ausencia de red afectiva, discapacidad, entre otras. Las consultas de las mujeres tienen que ver con orientación respecto al acceso a políticas sociales de fortalecimiento económico. Está aumentando el número de migrantes que viven en condiciones de extrema vulnerabilidad y de ersonas trans que comenzaron a vincularse con el espacio encontrando contención y acompañamiento desde lo legal, social.+