Emergencia sanitaria en Haití: La Iglesia se moviliza en ayuda del pueblo
- 17 de agosto, 2021
- Puerto Príncipe (Haití) (AICA)
Tras el devastador terremoto que eleva cada día más el número de muertos, ahora se espera la llegada de una tormenta tropical que podría complicar las operaciones de rescate en la zona sur.
El número de víctimas en Haití aumentó drásticamente tras el violento terremoto de 7,2 grados en la escala de Richter que se produjo el sábado 14 de agosto por la mañana, sembrando el pánico, especialmente en el suroeste del país. Mientras la tierra sigue temblando en las réplicas sísmicas, la llegada de la tormenta tropical Grace aumentaría aún más las penurias de los haitianos.
"El terremoto nos tomó por sorpresa y no estábamos preparados”, dijo a VaticanNews el padre Massimo Miraglio, camiliano de Cuneo que lleva 17 años en la comunidad haitiana de Jeremie. “La gente de aquí está acostumbrada a lidiar con huracanes e inundaciones, así que reaccionaron con mucho pánico".
Según el sacerdote, el mayor problema está en la parte baja e histórica de la ciudad, que se ha derrumbado, pero sobre todo en la zona montañosa que rodea a Jeremie.
Además, el terremoto generó desprendimientos de tierra que derribaron casas. La causa -puntualiza el religioso- es la deforestación incontrolada que se está produciendo en la isla desde hace años.
Los pocos hospitales de las regiones afectadas tienen dificultades para prestar atención de urgencia. Las unidades de emergencias están saturadas y ya escasea el material sanitario. Por eso el padre Massimo lanza un llamamiento: "se necesitan medicamentos y sobre todo material de primeros auxilios, gasas, vendas, desinfectantes".
Hay que recordar que este país tan pobre está afectado por la pandemia que ha creado el caos en las estructuras hospitalarias con unos 20.000 casos de contagio. "Esta catástrofe -concluye el padre Massimo- hará aún más ingestionable la afluencia de enfermos, que llegan aquí desde toda la provincia. Pensemos que en la zona de Jeremie sólo hay un hospital para 800.000 personas".
Las cifras de las víctimas en Haití aumentan drásticamente a medida que pasan las horas, los informes hablan hasta ahora de más de 1.400 muertos y más de 6.000 heridos, con un número desconocido de desaparecidos y más de 13.000 casas destruidas en las zonas donde se produjo el terremoto.
La Iglesia se moviliza en ayuda del pueblo haitiano
El padre Jean Denis Saint-Félix SJ, superior de los Jesuitas en Haití, dio a conocer que los jesuitas de esta región se reunieron el lunes 16 de agosto, para acordar el modo de intervención específico en el territorio. Asimismo, el religioso informó que el número de víctimas continúa creciendo. Las necesidades más urgentes son el agua, los alimentos, la asistencia médica y tiendas de campaña para refugiarse ante la llegada de la tormenta tropical Grace, por el momento algunos lugares no recibieron ningún tipo de ayuda humanitaria, es necesario coordinar los esfuerzos para atender a los sobrevivientes y continuar las búsquedas.
El sacerdote informó que el padre general de la Compañía de Jesús, dispuso un fondo de 20 mil dólares para comenzar la ayuda, al igual que la provincia de Haití que aportó otros 20 mil dólares, así como otras provincias jesuitas del continente.
Por su parte el episcopado chileno, en una carta firmada por su presidente, el cardenal Celestino Aós, y su secretario general, monseñor Sergio Pérez de Arce Arriagada, afirma el compromiso de “nuestra oración por todo el pueblo haitiano, especialmente por aquellos que perdieron la vida, sus familiares, y por quienes están sufriendo más gravemente las consecuencias de este acontecimiento”.
En un país marcado por la pobreza y violencia, los obispos chilenos lamentan que se sume esta tragedia natural. Ante esa situación, se espera “junto a toda la Iglesia del continente, encontrar formas de colaboración con la acción pastoral y solidaria que realiza la Iglesia haitiana en favor de los más pobres y los afectados por este terremoto”.
Asimismo, la Conferencia Episcopal Mexicana se sumará al esfuerzo internacional para ayudar a solventar las necesidades más inmediatas del pueblo haitiano.
Los obispos mexicanos indicaron que, a través de Cáritas mexicana, organismo que tendrá la responsabilidad de recibir y transferir los fondos, adelantarán una colecta nacional a la que invitan a creyentes y personas de buena voluntad con el fin de recaudar fondos para ayudar a las víctimas del terremoto.
“Ante esta situación, rogamos sumarse, con gesto misericordioso, espíritu generoso y fraterna caridad, a la colecta especial a favor de nuestros hermanos de Haití, para socorrerlos y acompañarlos ahora y en las siguientes fases de rehabilitación y reconstrucción. La mejor forma de acercar nuestra ayuda es a través del recurso económico que facilita y reactiva la economía local,” se lee en el documento que anexa las cuentas bancarias dispuestas para este objetivo.+