Mons. Lozano: "De presentación piramidal a pueblo en marcha"

  • 11 de julio, 2021
  • San Juan (AICA)
El arzobispo de San Juan especificó que ser "Iglesia en salida" es potenciar la vocación misionera, de cercanía con todas las situaciones humanas, especialmente las de mayor dolor y fragilidad.

El arzobispo de San Juan de Cuyo, monseñor Jorge Eduardo Lozano, recordó las muchas veces en las que el papa Francisco insiste en la necesidad de ser “Iglesia en salida”. 

“De este modo nos alienta a potenciar nuestra vocación misionera, de cercanía con todas las situaciones humanas, especialmente las de mayor dolor y fragilidad. No es salir para pasear sino para ir al encuentro de quienes están en las periferias geográficas y existenciales”, diferenció en su reflexión semanal.

“Una de las imágenes que nos ayudan a comprender a la Iglesia en su ser más profundo es la de ‘Pueblo de Dios’ que, a semejanza de Israel en el desierto, estaba en marcha a la Tierra Prometida. Caminaba con un rumbo, en la presencia permanente de Dios”.

El arzobispo sanjuanino destacó que “no somos una estructura estática o monolítica. Estamos en marcha” y ejemplificó: “El lema de nuestra Asamblea Arquidiocesana es ‘somos un Pueblo que camina, anuncia y sirve’, que expresa no solamente una consigna, sino también un acto de fe en nuestra manera de entendernos y presentarnos ante la sociedad”.

“Me acuerdo cuando era chico, que una manera de presentarnos a la Iglesia en la catequesis era la Pirámide en cuyo vértice superior se encuentra el Papa, luego los obispos, los sacerdotes, diáconos, religiosas y religiosos, y por último los laicos”.

“Francisco nos dice que la Iglesia es una pirámide, pero invertida, en la cual los pastores debemos estar en la base al servicio del Pueblo de Dios. Esto implica una apertura de mentalidad o, como se suele decir, un cambio de paradigma. Nos hace falta asumir decididamente la conversión pastoral para vencer actitudes de clericalismo tan arraigadas en la sociedad”.

Monseñor Lozano detalló que “el camino sinodal convocado por el Papa tendrá tres fases” y aseguró que la idea es “pasar de un evento puntual, a un proceso que no acabe, sino que nos lleve a opciones estables”.

“Es importante sostener con insistencia que se quiere una escucha real del Pueblo de Dios, y no meramente una encuesta de opinión. ‘La sinodalidad es el camino que Dios espera de la Iglesia en el tercer milenio’", concluyó citando al papa Francisco.+

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