Encuentro de Catequistas: "La explicitación de la fe en el ámbito de la escuela católica"

  • 17 de marzo, 2021
  • Buenos Aires (AICA)
La Vicaría Pastoral de Educación de la arquidiócesis de Buenos Aires realizó el pasado 12 de marzo, el primer encuentro de catequistas del año, que estuvo a cargo del presbítero Alejandro Puiggari.

Organizado por la Vicaría Pastoral de Educación, el sábado 12 de marzo tuvo lugar un encuentro para los catequistas de los colegios de la arquidiócesis de Buenos Aires. 

En esta oportunidad estuvo a cargo del presbítero Alejandro Puiggari, rector del ISCA (Instituto Superior de Catequesis Argentino), quien reflexionó en torno a la explicitación de la fe en el ámbito de la escuela católica.  

El sacerdote señaló que la escuela católica debe explicitar su fe, y siempre respetar a los que no profesan el credo católico. “Estamos llamados a llevar al Reino a los demás, siguiendo el protocolo de Mateo 25: ‘Cada vez que lo hiciste al más pequeño de mis hermanos, a mí me lo hiciste’”, dijo el padre Puiggari. 

Al mismo tiempo, resaltó que “no debemos quedarnos en una mirada meramente humana de este protocolo, sino que debemos tener una perspectiva cristológica, ya que nuestra tarea se realiza a la luz del Verbo, y no desde una perspectiva meramente humana”.  

El rector del ISCA señaló la necesidad de evitar hacer de la catequesis escolar una catequesis de parroquia, “ya que necesita un rigor y un estatus epistemológico, y está a cargo de un docente”. Por otro lado, “también debemos evitar que la catequesis, es decir, el anuncio del kerygma, se reduzca al ámbito parroquial; en dicho caso, la catequesis escolar corre el riesgo de limitarse a la mera transmisión de datos y contenidos vacíos de vida”. 

“Esta misión de evangelizar en nuestros colegios se encuentra inmersa en medio de una crisis de la transmisión de la fe; pero dicha crisis excede a la escuela, ya que es una crisis de las parroquias, de las familias, etc.”, destacó.

Haciendo referencia al año de pandemia, el padre Puiggari mencionó que “la experiencia del 2020 funcionó como catalizador, y puso en evidencia algunos aspectos de la educación que resultaban caducos. Sin embargo, la pandemia reforzó el pacto educativo, la importancia de volver a la escuela. Como toda crisis, presenta un desafío y una oportunidad, y no podemos quedarnos esperando y pretender que vuelva la normalidad de antes. Dios se manifiesta en el hoy, y está con nosotros, por eso no debemos tener miedo. Hay una Presencia que habita en nuestra interioridad”.  

Puiggari manifestó que “necesitamos encontrarnos con Dios en el silencio, los chicos necesitan la presencia del Señor, ir a la capilla. Quieren y necesitan silencio, pero frente a Alguien, no con una mera interioridad a modo de ‘encuentro con uno mismo’. Para entender y transmitir esto, necesitamos ser testigos, pasar por la experiencia de San Juan Bautista: ‘hay alguien que es más grande que yo’”.   

El padre Puiggari invitó a “ser militantes del gerundio; es decir, anunciar el kerygma acompañando. No solamente transmitimos contenidos, sino que enseñamos a caminar. Así como el Señor se inclina en la kénosis, también nosotros debemos inclinarnos y acompañar la vida de los alumnos, porque ellos no son simples destinatarios, sino que son interlocutores, y de ellos estamos llamados también a aprender y caminar juntos”.  

“La misión del catequista requiere de la parresía que el papa Francisco pregona desde que era arzobispo de Buenos Aires. En otros términos, necesitamos ser una Iglesia del Espíritu, que no apague el fuego, sino una Iglesia valiente y con fuerza”.  

Asimismo, resaltó la importancia de descubrir a Jesús no solo en la catequesis, sino también en la evangelización del currículo: “De ahí la conveniencia de un diálogo interdisciplinar bajo las alas de la fe y la razón, aspecto sobre el cual viene trabajando la Vicaría de Educación bajo las direcciones Pedagógica y de Pastoral”. 

Por último, el padre Puiggari invitó a “ponernos en manos de San José, quien tuvo la capacidad de soñar sin dormirse, y por eso pudo caminar en la incertidumbre. De la misma manera, nosotros podemos calmar toda ansiedad; ante la incertidumbre, buscar la calma que proviene de descubrir una presencia, por ejemplo, en la adoración frente al Santísimo, que nos aquieta y pacifica, porque se da la presencia de Alguien”.  

“Vayan a José, buscando esa valentía creativa que lo caracterizó”, concluyó.

Más información sobre las actividades de Vicaría de Educación en www.vicaria.edu.ar.+