Mons. Bochatey: "La votación confirma lo dividido que está el pueblo argentino"

  • 11 de diciembre, 2020
  • Buenos Aires (AICA)
Luego de la media sanción en la Cámara de Diputados de la Ley de Aborto, el presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral de la Salud, monseñor Alberto Bochatey OSA, dialogó con Radio Rivadavia.

El presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral de la Salud, monseñor Alberto Bochatey OSA, dialogó con Radio Rivadavia sobre el proyecto de ley de aborto, que recibió media sanción en la Cámara de Diputados.

El obispo auxiliar de La Plata se mostró sorprendido por la poca diferencia, “con 129 votos salía y tuvieron 131”, detalló. “Esto confirma lo frágil, lo débil de esta mayoría, lo dividido que está el pueblo argentino sobre esto, siendo que la presión en la Cámara de Diputados fue tan fuerte que se pensaba que iban a tener muchos más votos”.

“Ver positivo en estas cosas negativas cuesta, pero la verdad es que yo pensé que según decían ellos, esta ola verde había tenido muchos más diputados a favor. Las abstenciones eran previsibles y sólo fueron seis, o sea que realmente está hablando que hay que pensar muy bien el tema, creo que es muy grave el contenido como para pensar que el país está decidido a dejar pasar esta ley que es tan injusta, que tiene tantas carencias desde la partida”.

Sobre lo que posiblemente suceda en el Senado, el prelado expresó: “Yo tengo 65 años y no me confío en nada de lo político, hay que ver que las cosas sucedan. Esperemos que haya realmente un buen diálogo, que se busque otro tipo de soluciones más modernas, estamos votando leyes del siglo pasado”, consideró. “La humanidad ha caminado mucho, la mujer tiene muchísimas más libertades y ha obtenido muchísimas más posibilidades de decidir realmente, y acá estamos volviendo a decidir sobre matar o no una vida. Acá lo que hay que decidir es que la mujer no se quede embarazada cuando no lo quiere, la educación, la formación y los valores para poder ejercer con plena libertad su vida sexual, porque de algo que no se ha hablado en todo el debate fue sobre la responsabilidad que tienen los adultos sobre esto”.

“¿Qué pasa con los varones? ¿Qué pasa con las mujeres? Dicen que son 300 mil abortos al año, ¿Hay tantas mujeres que no saben vivir su sexualidad? La ley no prevé nada de esto, no es progresista, va muy para atrás. Muchísimos países de Europa que tuvieron leyes de aborto en la década de los ‘70 han rehecho las leyes, han cambiado las formas del aborto porque no pueden negar que el aborto es la eliminación de una vida”.

“Todos somos el mismo ser desde que nuestros padres nos concibieron, volver con el mismo esquema, decir que esto libera a la mujer no es cierto: la mujer quedaría liberada cuando realmente no hubiera ninguna mujer que no tuviera actos sexuales responsables. Hay una responsabilidad en el acto de la acción sexual, esto es lo que tenemos que trabajar y no hay ni una palabra en la ley, y sobre todo, deja el 50% de la población de esta supuesta problemática de salud pública, excluida, que son los varones”, advirtió.

“Todos tenemos la experiencia de haber acompañado a mujeres que han abortado y siempre es un fracaso, siempre es doloroso, yo cuando veía a todos festejando pensaba que es un país muy raro, que la mujer festeje el fracaso de la mujer, que nadie mire otro tipo de soluciones más creativas, más modernas, porque en definitiva lo que hay es una negación de la responsabilidad de los actos. Hay que trabajar en la causa, no en la consecuencia”, consideró.

Consultado sobre el papel de la Iglesia, el prelado explicó: “Esta vez ha quedado más claro que este no es un tema religioso ni de la Iglesia, porque acá han acompañado otros diputados ateos, de otras religiones y demás. El tema dentro de la Iglesia es un tema que va por otros carriles: el tema de cumplir con los mandamientos, lo que es propio de su religión. No podemos decir que todas las mujeres que abortan no son católicas, pero no es el común denominador. Realmente aquel que vive la fe, difícilmente llegue a un aborto porque lo ve contrario a la fe a la que él libremente adhiere”, aclaró.

“El tema de la Iglesia, como el tema de la religiosidad en todo Occidente, va por canales mucho más complejos y amplios sobre el nivel cultural, el nivel de concepción de la vida, etc. Como decía el papa Francisco también, esto es un problema humanista, una sociedad en la que para solucionar un problema hay que eliminar a un ser vulnerable, es un atraso de raíz. Yo no niego que exista el aborto, como existen muchos otros delitos, pero no por eso los hacemos derechos, no por eso los legalizamos. Hagamos cosas para que esto no suceda”, propuso.+