Negativa del Vaticano a la comunión eucarística entre católicos y protestantes

  • 24 de septiembre, 2020
  • Berlin (Alemania) (AICA)
La Congregación para la Doctrina de la Fe dio una negativa teológicamente justificada a permitir a católicos y protestantes celebrar misas conjuntas.

La Congregación para la Doctrina de la Fe, negó la posibilidad de las invitaciones mutuas a la Cena del Señor y a la Eucaristía por parte de protestantes y cristianos en Alemania, propuesta en el documento ‘Juntos a la mesa del Señor’, elaborado por el Grupo de Trabajo Ecuménico de Teólogos Católicos y Protestantes (ÖAK).

Las diferencias en la comprensión de la Eucaristía y el oficio eclesiástico son "todavía tan importantes" que en la actualidad se excluye la intercomunión entre católicos y evangélicos, señalan. 

Tampoco hay motivos para una "decisión individual de conciencia", dice la carta de la Congregación para la Doctrina de la Fe, dirigida al presidente de la Conferencia de Obispos Alemanes, monseñor Georg Bätzing. 

Se adjunta a la carta una explicación teológica que analiza críticamente los diversos puntos del documento del ÖAK.

El texto del ÖAK "Juntos a la mesa del Señor", anunciado en septiembre de 2019, firmado por monseñor Bätzing, debía contribuir a superar el "bloqueo" a largo plazo. Recientemente, monseñor Bätzing anunció que este modelo se aplicará en el Congreso Ecuménico de Iglesias el próximo año en Frankfurt.

La carta fechada el 18 de septiembre fue firmada por el cardenal Luis Ladaria Ferrer, prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe y su secretario, monseñor Giacomo Morandi. En su opinión, el documento alemán "explica insuficientemente" las cuestiones del "concepto católico de la Iglesia, la Eucaristía y el oficio". 

Tal como están las cosas, la apertura a la comunión eucarística con la Iglesia Evangélica en Alemania crearía "inevitablemente nuevos obstáculos al diálogo ecuménico con la Iglesia Ortodoxa" fuera de Alemania.

En concreto, el Vaticano cree que se subestima "la relación entre la Eucaristía y la Iglesia". Las "declaraciones teológicas esenciales y necesarias" del Concilio Vaticano II (1962-1965) y la tradición común con la ortodoxia tampoco fueron suficientemente apreciadas. El texto no expresa la comprensión de la Eucaristía y el ministerio que se ha expresado más de una vez en foros internacionales de diálogo católico-luterano.

La Congregación indicó que la propia Conferencia Episcopal Alemana vio "la necesidad de una mayor profundización teológica de algunos temas fundamentales, como la cuestión de la presencia real de Jesús y el concepto del sacrificio de la Eucaristía". La cuestión de la ordenación sacerdotal y la relación entre el Bautismo, la Eucaristía y la comunión de la Iglesia también está relacionada con esto.

La Congregación para la Doctrina de la Fe explicó que se había ocupado del asunto tras recibir el 20 de mayo una solicitud de la Congregación para los Obispos para evaluar el texto "Juntos en la Mesa del Señor". 

Anteriormente, la posición del Grupo de Trabajo Ecuménico fue discutida por los obispos católicos alemanes en la reunión plenaria de primavera y por la comisión ecuménica de la conferencia de obispos.

El portavoz de la Conferencia Episcopal Alemana, Matthias Kopp, confirmó que la carta del Vaticano fue recibida y será discutida en la reunión plenaria de otoño de los obispos la próxima semana en Fulda.

Card. Koch a los obispos alemanes: “No pueden llevar una agenda propia”
El presidente del Pontificio Consejo para la Promoción de la Unidad de los Cristianos, coincide con las objeciones de Doctrina de la Fe en la negativa a permitir a católicos y protestantes celebrar misas conjuntas.

“Si los obispos alemanes calificaran la carta de la Congregación para la Doctrina de la Fe menos que un documento de un grupo de trabajo ecuménico, entonces algo ya no estaría bien en la jerarquía de criterios entre los obispos. Después de esta solicitud de hablar desde Roma, los obispos no pueden simplemente continuar con su propia agenda”, expresó el cardenal Curt Koch, en una entrevista con Herder Korrespondenz.

“La carta de Roma”, añadió el cardeal Koch, indica claramente que el documento de la ÖAK toca temas que no pueden ser decididos simplemente por la Iglesia de un país”. Asimismo, subrayó que le “cuesta entender” de qué manera “se quiere seguir el camino de la comunión eucarística entre católicos y protestantes sin incluir a los ortodoxos y orientales en la conversación”.

Para el purpurado, la misiva de Doctrina de la Fe no puede ser tomada como una simple aportación más al diálogo, sino que se trata de “un examen fáctico muy serio” del documento ‘Juntos a la mesa del Señor’. 

“La Congregación para la Doctrina de la Fe llama la atención sobre cuestiones que el documento ÖAK considera resueltas, pero que aún deben ser discutidas y profundizadas”, afirmó.

De esta manera, el cardenal subraya que, mientras la ÖAK “apoya la tesis de que estas ya no son diferencias entre las iglesias, y se asume que la Cena del Señor Evangélico y la Eucaristía Católica son básicamente dos formas diferentes de un acontecimiento”, la Congregación para la Doctrina de la Fe señaló que “claramente existen serias diferencias y que, por lo tanto, las consecuencias extraídas en el documento ÖAK no pueden ser consideradas responsables en la situación ecuménica actual”. +