La Iglesia apela al diálogo y a deponer actitudes de violencia
- 11 de agosto, 2020
- La Paz (Bolivia) (AICA)
"El derecho a la vida y a la salud", comunicado del episcopado boliviano apelando al diálogo y a deponer las actitudes de violencia.
La Conferencia Episcopal Boliviana (CEB), emitió un comunicado titulado: “El derecho a la vida y a la salud”, ante los graves conflictos sociales y la crisis sanitaria que sufre Bolivia, reitera su disponibilidad para facilitar el diálogo y exhorta a los dirigentes sindicales a “deponer actitudes de violencia, levantar los bloqueos y aceptar un diálogo sereno en búsqueda de soluciones”.
En el texto, difundido el 10 de agosto, los obispos hacen el pedido al Tribunal Supremo Electoral a fijar la fecha de las elecciones y manifiesta su preocupación por la influencia de la crisis política en la falta de autoridad y de soluciones efectivas ante la dificultad sanitaria.
Dio lectura al comunicado, monseñor Aurelio Pesoa, secretario general de la CEB y lo acompañaron, monseñor Giovani Arana, administrador apostólico de El Alto y el padre Ben Hur Soto, secretario para la Pastoral de la CEB.
Los obispos llamaron “a respetar la separación de Poderes, principio básico de una democracia sana, aceptando la fecha propuesta por el órgano electoral”.
Dirigiéndose a los dirigentes sindicales los exhortaron a deponer las actitudes de violencia, levantar los bloqueos y aceptar un diálogo sereno que busque soluciones.
“No pongan en peligro la salud y la vida de los bolivianos, de ustedes mismos y de sus familias, sirviendo a consignas políticas y reivindicando la realización de elecciones en medio de una subida acelerada de contagios y muerte de tantos compatriotas, además de agravar la ya difícil situación económica que vivimos”, advirtieron.
Al expresar su preocupación por la violencia, señalaron que con el enfrentamiento entre diferentes grupos enfrentados se pone en peligro la seguridad y la vida de la gente. “El odio no es la solución a ningún problema. Condenamos toda violencia venga de donde venga, que nos lleva a la pérdida de vidas humanas y a colocarnos en una espiral inacabable de violencia y que puede generar mayores conflictos”, precisaron.
Para la Iglesia la vida de los seres humanos es un valor absoluto, que jamás debe utilizarse para lograr ningún otro objetivo y que quien pone en peligro la vida de otras personas cae en un acto criminal e inhumano que puede provocar la muerte de otras personas lo que además de irracional es inmoral mucho más cuando se usa la pandemia para desestabilizar las instituciones sin medir las consecuencia que implica la pérdida de vidas humanas entre los bolivianos.
Finalmente explicaron que este es un momento para la solidaridad y la esperanza, por lo que no se puede permitir que crezca el desánimo y el temor. “La prudencia es la que debe guiar nuestros actos y no el miedo, que no ayuda a salir victoriosos de la actual situación“. Sin olvidar, la capacidad del pueblo boliviano para enfrentar los problemas lo que debe ser un motivo de esperanza y una muestra de que Dios nunca abandona en medio de las dificultades. +