Mons. Canecin: La catequesis debe asumir y partir de la realidad

  • 30 de abril, 2018
  • Goya (Corrientes) (AICA)
Organizados por la Junta Diocesana de Catequistas y con el lema "Nadie puede dar lo que no tiene", la diócesis de Goya reunió a centenares de catequistas en encuentros de los decanatos Uruguay y Paraná. En ambos encuentros estuvo el obispo diocesano, Mons. Adolfo Ramón Canecin y predicaron el padre Walter Obregón SJ y la religiosa carmelita Martha Pelloni. Los encuentros se llevaron a cabo en Curuzú Cuatiá y Lavalle respectivamente.
Organizados por la Junta Diocesana de Catequistas, cuyo asesor es el presbítero Juan Carlos Mendoza, y con el lema "Nadie puede dar lo que no tiene", la diócesis de Goya reunió a centenares de catequistas en encuentros de los decanatos Uruguay y Paraná. En ambos encuentros estuvo el obispo diocesano, monseñor Adolfo Ramón Canecin y predicaron el sacerdote jesuita Walter Obregón y la religiosa carmelita Martha Pelloni. Los encuentros se llevaron a cabo en Curuzú Cuatiá y Lavalle respectivamente. Monseñor Canecin destacó "la alegría de haber sido llamados para este servicio", es decir, "la alegría de la experiencia del encuentro con Jesús, que tienen que ser los sentimientos que nos caracterizan", expresó. Dijo que ante los "desafíos" que en la actualidad presenta la catequesis, suelen surgir "sentimientos de impotencia o del yo no puedo" porque "desborda o supera la misión". Entonces "por encima de toda situación debe estar la alegría de haber sido llamados a ser catequistas porque "ser catequista es una vocación". Destacó también que otro de los grandes desafíos que tienen los catequistas es "el encuentro existencial vivo con Jesucristo" y si no se logra esto la catequesis tendría que "replantearse contenidos, métodos, modos y formas", porque "no se trata solamente de "transferir doctrinas o conocimientos", al tiempo que recordó la expresión del papa emérito Benedicto XVI que decía que "la fe no se suscita por una decisión ética o por una cuestión de ideas sino que es producto del encuentro con la persona de Jesús". "La catequesis no tiene que ser solamente para un determinado sacramento, sino que debe provocar el encuentro: de ahí brota el discipulado, el seguimiento de Jesús", señaló monseñor Canecin. Agregó que "toda catequesis tiene que asumir y partir de la realidad", teniendo en cuenta la disertación de la hermana Martha Pelloni que habló de las situaciones de violencia y de inseguridad, "entre otros flagelos que hoy son parte de nuestra realidad que no podemos obviar". Aconsejó que a partir de la realidad, los catequistas tengan "un protocolo de actuación y de conocimientos de determinadas circunstancias que se presentan, como situaciones de abuso, acoso o violencia y, en esto, el catequista no tiene que ser indiferente". La Misa de clausura fue presidida por monseñor Canecin quien en su homilía animó a los catequistas a continuar trabajando en sus comunidades, "abrazando con pasión la importante misión que el Señor les encomendó".+