Una pandemia no puede separarnos de la misa, afirmó el presidente del episcopado polaco

  • 22 de abril, 2020
  • Varsovia (Polonia) (AICA)
Declaraciones del presidente de la Conferencia Episcopal Polaca, monseñor Stanislaw Gadecki, refiriéndose al pronóstico presentado por el Ministro de Salud

No podemos imaginar que la “nueva normalidad” significaría el aislamiento duradero de la mayoría de la sociedad durante años de la posibilidad de participación personal en la Santa Misa y en otros ritos religiosos, cree el arzobispo de PoznaÅ? y presidente de la Conferencia Episcopal Polaca, monseñor Stanislaw Gadecki, refiriéndose al pronóstico presentado por el Ministro de Salud de que la epidemia podría durar en Polonia por otros dos años.

Al final de la oración del rosario por el cese de la pandemia, transmitida diariamente en las redes sociales desde la capilla privada del área metropolitana de PoznaÅ?, el arzobispo Gadecki señaló que la exención de la obligación de “ir a la iglesia los domingos y días festivos” no significa “liberarse de la obligación de participar en la Eucaristía”.

“La dispensa no significa tomarse vacaciones de Dios”, expresó. Vale la pena conectarse con las celebraciones que se transmiten a través de Internet o la televisión, se puede ver y rezar, pero no como ver películas o escuchar una obra, sino conectarse espiritualmente con lo que está sucediendo en la iglesia”, dijo el arzobispo Gadecki, según se lee en la información de la agencia católica Kai.

El presidente del episcopado polaco también se refirió a las palabras del papa Francisco, quien lamentó que la epidemia nos obligó a vivir a través de los medios de comunicación, y la intimidad con Cristo sin comunidad, sin sacramentos, sin la Iglesia, sin personas es peligrosa, puede convertirse en una relación gnóstica, una relación separada del pueblo de Dios.

Además de esta reacción, el episcopado polaco anunció a través de su vocero, padre Pawel Rytel-Andrianik, que las parroquias informarán a los creyentes locales la forma en la que pueden asistir a la celebración de la Eucaristía, cumpliendo nuevas normativas que exigen que sólo esté presente una persona por cada 15 metros cuadrados de área en los templos.

Cada párroco realizará las mediciones y cálculos para determinar el número máximo de fieles en cada celebración. Aunque sigue vigente la dispensa de la obligación de asistir a la Eucaristía dominical, las nuevas reglas "crean la posibilidad de que en más iglesias se puedan orar, recibir la confesión y la Eucaristía que en las semanas anteriores", informó el Episcopado.

"Tenemos que recordar que, como lo dijo recientemente el Papa, no podemos desplazar la Iglesia y los sacramentos sólo al mundo virtual", concluyó el padre Rytel-Andrianik. +