Mons. Ñáñez: "El amor divino que se abre desbordante de comprensión y bondad"

  • 20 de abril, 2020
  • Córdoba (AICA)
El arzobispo de Córdoba, monseñor Carlos José Ñáñez, celebró la misa del segundo domingo de Pascua, fiesta de la Divina Misericordia desde el Convento de las Carmelitas Descalzas de Córdoba

Al concluir la Octava de Pascua, el domingo 19 de abril, el arzobispo de Córdoba, monseñor Carlos José Ñáñez, celebró la misa de la fiesta de la Divina Misericordia, desde el Convento de las Carmelitas Descalzas de Córdoba, transmitida por los medios digitales para toda la comunidad arquidiocesana.

Al comenzar, explicó el sentido de la Octava de Pascua: “Ocho días en el que se celebra de modo especial el feliz acontecimiento de la Resurrección de Jesús, que corona su ofrecimiento sobre la cruz en favor de todos los hombres. Ocho días para festejar y para interiorizar cada vez más el enorme misterio del triunfo del Señor sobre la muerte y su ingreso en la plenitud de la vida”.

Seguidamente, se centró en el Evangelio del día, en el encuentro de Jesús Resucitado con los discípulos: “Hay algo novedoso en ese encuentro que despierta el asombro de los discípulos (…) El Señor quiere poner de manifiesto que es el mismo que estuvo pendiente de la cruz y que murió en ella, y que ahora resucitó”. Entonces describió algunos “efectos” de este encuentro.

En primer lugar la paz: “Por tres veces en la escena el Señor otorga la paz a sus discípulos. Esta triple repetición señala la voluntad efectiva y permanente de comunicar este don, que no es simplemente la ausencia de conflictos o de dificultades de cualquier tipo, sino la seguridad de la plenitud de los favores divinos”.

Luego se manifiesta la alegría que el Señor aseguró en su promesa: “Ustedes ahora están tristes, pero yo los volveré a ver y tendrán de una alegría que nadie les podrá quitar”. Además, el Resucitado les regala al Espíritu Santo y los capacita para la misión: “serán instrumentos de la misericordia divina”, explicó monseñor Ñáñez.

Más adelante, el arzobispo habló sobre la fiesta de la misericordia y respondió a la pregunta: “¿Qué es la misericordia? Es el amor divino que se abre desbordante de comprensión y bondad a la fragilidad humana para socorrerla, al pecado para perdonarlo y para sanar el corazón herido por ese mal. ¿Cómo acercarse a esa misericordia? ¿Cómo alcanzar sus beneficios? Con la firmeza de la fe, con la confianza llena de esperanza de alcanzar ese regalo de la bondad infinita de Dios”.

En efecto, “a la misericordia debemos acercarnos con fe firme, con confianza llena de esperanza, pero al mismo tiempo, para beneficiarnos con ella, debemos estar verdaderamente arrepentidos de nuestras faltas, lo cual significa que las desaprobamos y que tenemos el firme propósito de cambiar de conducta y de reparar, en la medida de lo posible, los daños provocados”, explicó el prelado.

“Entonces sí, la misericordia realiza la maravilla del perdón. Para sanar, es indispensable acercarse al ‘hospital de campaña’ de la divina misericordia, pero al mismo tiempo no es menos indispensable dejarse curar”.

Antes de concluir, volvió a mencionar el tema de la pandemia, como una oportunidad para trabajar en la “cultura del encuentro”: “De la pandemia y de sus enormes consecuencias no se sale solos, sino todos juntos, dialogando con respeto, apertura, razonabilidad, sin la ceguera que imponen las ideologías que traban todo sano y sereno intercambio de ideas y de propuestas. Una sociedad con la preocupación y el noble propósito de forjar y ofrecer condiciones de vida digna para todos y no solo para algunos o sólo para algún sector”, aseguró.

Finalmente, invocó a la Santísima Virgen e invitó a la comunidad a contemplar su gozo en la mañana de Pascua: “Después del dolor inmenso del Calvario, la alegría desbordante de la resurrección de su Hijo, el Salvador de todos. A ella nos encomendamos, pidiéndole que nos alcance el fin de la pandemia, que consuele a los afligidos por las pérdidas sufridas, que alcance la salud a los enfermos y que nos cuide y nos ayude a todos a transitar estos momentos”.+