Pese a la lluvia y la nieve, numerosos fieles peregrinaron a la Virgen de las Nieves

  • 30 de octubre, 2017
  • San Carlos de Bariloche (Río Negro) (AICA)
La lluvia, la nieve y las temperaturas bajas, no impidieron que numerosos barilochenses participaran el 29 de octubre de la XXIV Peregrinación a la gruta de Nuestra Señora de las Nieves, que llevó por lema "Con María oremos y trabajemos por la paz y la esperanza de nuestro pueblo". La misa fue presidida por el nuncio apostólico, monseñor Emil Paul Tscherrig, y concelebrada por el obispo de San Carlos de Bariloche, Juan José Chaparro CMF, quienes agradecieron el esfuerzo de los peregrinos.
La lluvia, la nieve y las temperaturas bajas, no impidieron que numerosos fieles de la diócesis de San Carlos de Bariloche participaran el domingo 29 de octubre de la XXIV Peregrinación a la gruta de Nuestra Señora de las Nieves, que llevó por lema "Con María oremos y trabajemos por la paz y la esperanza de nuestro pueblo". Un grupo de devotos salió desde Plaza Belgrano, en el centro barilochense, y otro lo hizo desde los barrios altos de la ciudad por un camino de montaña, en el que la caída de nieve fue intensa. La misa en la gruta de la Virgen fue presidida por el nuncio apostólico, monseñor Emil Paul Tscherrig, y concelebrada por el obispo de San Carlos de Bariloche, Juan José Chaparro CMF, quienes agradecieron el esfuerzo de los peregrinos pese a las condiciones climáticas. [img]http://www.aica.org/subidas/3032.jpg[/img] "La situación no es fácil y a veces, ante estas situaciones que nos duelen, este es un momento para encontrar paz", expresó monseñor Chaparro al finalizar la misa. "La espiritualidad es una fortaleza. Por eso han venido de los rincones de la diócesis, de Ñorquinco a Jacobacci", destacó. Monseñor Chaparro agradeció la presencia del nuncio, al manifestar: "No tenemos al papa Francisco, pero tenemos a su representante desde hace cinco años". Ahora, monseñor Tscherrig tiene un nuevo destino que es Roma. Es el primer nuncio no italiano en Italia. Un cambio dentro de tantos que hay que ir haciendo poco a poco. Yo le hice esta invitación hace unos años y pese a tener destino tuvo la delicadeza de venir por un día", reveló. Durante la celebración de la misa, las inclemencias del tiempo obligaron a los peregrinos a abrir sus paraguas o a taparse, como muchos sacerdotes, con capuchas.+ [img]http://www.aica.org/subidas/3033.jpg[/img]