Mons. Azpiroz Costa llamó a los estudiantes a descubrir su vocación

  • 21 de septiembre, 2017
  • Bahía Blanca (Buenos Aires) (AICA)
En ocasión del Día del Estudiante, el arzobispo de Bahía Blanca, monseñor Carlos Alfonso Azpiroz Costa OP, envió un saludo a los jóvenes: el prelado los invitó "a soñar, a volver a descubrir el sentido más profundo de nuestra vocación, el propósito de ser útiles a la sociedad, a la comunidad".
El arzobispo de Bahía Blanca, monseñor Carlos Alfonso Azpiroz Costa OP, saludó a los estudiantes en su día. Mediante una carta, el prelado los invitó "a soñar, a volver a descubrir el sentido más profundo de nuestra vocación, el propósito de ser útiles a la sociedad, a la comunidad". Monseñor Azpiroz Costa recordó también en este día al apóstol y evangelista San Mateo, quien "publicano o cobrador de impuestos, quizás preocupado por obtener ganancias, por proteger su patrimonio, fue llamado por Jesús a seguirlo", y agregó que "ha sido este apóstol quien más nos ha ofrecido pinceladas sobre el ideal de la comunidad de los discípulos misioneros del Maestro, sus gozos y esperanzas, sus tristezas y angustias". El prelado destacó el valor de "la unión, la comunidad, la voluntad y la inteligencia, el deseo de estudiar, aprender juntos", y advirtió que "el resentimiento, el rencor, la revancha no dan espacio ni libertad a la inteligencia y al corazón para aprender, enseñar, conocer y hacer conocer, amar y hacer amar la verdad". Recordando las palabras de San Juan Pablo II en su visita a la Argentina, el arzobispo animó: "No dejen que el odio marchite las energías generosas y la capacidad de entendimiento que todos llevan adentro. Hagan, con sus manos unidas, una cadena de unión más fuerte que las cadenas de la guerra. Así serán jóvenes y preparadores de un futuro mejor; así serán cristianos". "En este día, también fiesta de la vida que se renueva, se nos invita a soñar, a volver a descubrir el sentido más profundo de nuestra vocación, el propósito de ser útiles a la sociedad, a la comunidad", afirmó el prelado.+ » Texto completo de la carta