El obispado de Quilmes, a través de la Junta Regional de Educación Católica (Jurec) emitió un comunicado ante la delicada situación que atraviesa el Instituto San Juan Bautista, debido a la "indeseable y vergonzosa actitud que aparentemente un profesor tuvo con los alumnos". Como propietario de la institución educativa, el obispado informa que "ni bien fue notificado", el docente en cuestión fue separado de su cargo.
A través de una carta firmada por la Junta Regional de Educación Católica (Jurec), el
obispado de Quilmes comunicó que el docente del Instituto San Juan Bautista, de Florencio Varela, acusado de haber tenido una "indeseable y vergonzosa actitud" con los alumnos, fue separado de su cargo en cuanto se tuvo conocimiento de la situación.
Como propietario de dicha institución educativa, el obispado de Quilmes inició una investigación que aún continúa, para determinar la resolución que se tomará en este tema. "Asimismo, como lo establecen los protocolos para estos casos, la Dirección Provincial de Educación de Gestión Privada (Dipregep), mediante sus inspectores, inició a este docente las actuaciones correspondientes", señala el comunicado.
La intención de informar sobre esta situación es la de "en primer lugar, tranquilizar a los alumnos y, especialmente, a sus familias, quienes confían sus hijos a esta histórica y respetable institución educativa; en segundo, para que el personal docente y no docente que cada día se pone al servicio de la educación en este establecimiento siga sintiendo el apoyo que el obispado de Quilmes le brinda cotidianamente con la firme vocación de servicio como lo marca el Evangelio de Jesucristo. Finalmente, en tercer lugar, para que la sociedad en su conjunto ?que suele conocer estas situaciones a través de los medios de comunicación y de las redes sociales? sepa que el obispado de Quilmes, como propietario de varias instituciones educativas en los partidos de Berazategui, Florencio Varela y Quilmes, siempre ha estado, y lo seguirá estando, en contra de cualquier expresión o idea que atente contra la vida, la verdad, la justicia y la paz, especialmente cuando los que están en juego son los niños y los jóvenes".
La carta concluye recordando que "en los años de historia de la Iglesia Católica, la educación en las ciencias y en las artes siempre ha sido un objetivo fundamental, siempre orientado desde una mirada de fe, logrando una educación integral de la persona que aún perdura en todos los rincones en donde la Iglesia está presente. Esta sigue siendo la meta que persigue con firmeza el obispado de Quilmes a través de sus instituciones educativas en todos sus niveles, porque como Iglesia tenemos la certeza de que es necesario seguir fomentando la educación como acción fundamental para la construcción de una sociedad más justa, solidaria y comprometida con los demás".+