Mons. Urbanc reinauguró y dedicó un templo a María Auxiliadora en Los Altos

  • 29 de mayo, 2017
  • Santa Rosa (Catamarca)
La comunidad parroquial de María Auxiliadora, en Los Altos, diócesis de Catamarca, celebró el 24 de mayo a su patrona con la reinauguración y dedicación del templo. La celebración fue presidida por el obispo, monseñor Luis Urbanc.
Una gran cantidad de fieles se congregó el miércoles 24 de mayo en Los Altos, departamento de Santa Rosa, de la diócesis de Catamarca, para celebrar a María Auxiliadora y participar de la reinauguración y dedicación del templo. Las celebraciones fueron presididas por el obispo de Catamarca, monseñor Luis Urbanc, y comenzaron con una procesión que llevó la imagen de María Auxiliadora por las calles del pueblo. Acompañaron a la comunidad el párroco anfitrión, presbítero Domingo Chaves, sacerdotes del decanato Este y párrocos vecinos de Santiago del Estero. La multitudinaria manifestación de fe también contó con la presencia de autoridades provinciales y departamentales, entre ellas el ministro de Obras Públicas, Rubén Dusso, el diputado nacional, Isauro Molina, y el intendente de Los Altos, Rafael Olveira. Al llegar al templo, en nombre de todos los que trabajaron en las refacciones del edificio, el intendente hizo entrega de la obra, y destacó la tarea realizada en forma conjunta entre el ministerio de Obras Públicas de la Provincia, el Municipio de Los Altos y el Consejo de Pastoral de la parroquia de Santa Rosa de Lima, consistente en la refacción completa del techo y cielorraso. Explicó que al techo se le colocó chapa nueva, membrana aislante y que el cielorraso de lana de vidrio es ignífugo, térmico y acústico. Esta obra fue necesaria a raíz del gran deterioro que sufrió el templo por las fuertes y constantes lluvias que castigan la zona desde hace algunos años. La obra también incluyó la pintura general e iluminación de la capilla. Luego se procedió al corte de cinta y a continuación dio inicio la misa en la que monseñor Urbanc dedicó el templo a María Auxiliadora. En el inicio de la ceremonia, se dio lectura a los decretos correspondientes, seguido de la bendición del agua, con la que el obispo roció al templo y a las personas. En su homilía, el pastor diocesano agradeció al párroco y a las autoridades por la obra realizada, explicó el significado de la dedicación de un templo e hizo hincapié en el trabajo en unidad que permitió que la comunidad tenga un templo para reunirse y dar culto a Dios, donde todos puedan sentirse hijos y parte de la Iglesia. También exhortó a los presentes a cuidarlo y respetarlo, como lugar de oración. Antes de la bendición final, la secretaria del Consejo de Pastoral de la parroquia agradeció a todos los que fueron parte de este proyecto que por gracia de Dios y mucho sacrificio ya es una realidad para todo el pueblo. Al finalizar la celebración eucarística, se realizó un homenaje con números artísticos y un brindis comunitario.+