Mons. Barbaro participó de dos encuentros de Renovación Carismática Católica

  • 3 de mayo, 2017
  • Presidencia Roque Sáenz Peña (Chaco)
Servidores y jóvenes de la Renovación Carismática Católica (RCC) de la diócesis de San Roque de Presidencia Roque Sáenz Peña realizaron dos encuentros de oración y formación por separado, y el obispo local, monseñor Hugo Barbaro, participó de ambos y presidió la misa. Los participantes reafirmaron su identidad de ser cristianos, en la Iglesia y para servir en ella. Uno de los predicadores fue Alberto Blanes.
Un grupo numeroso de fieles de la Renovación Carismática Católica (RCC) de la diócesis de San Roque de Presidencia Roque Sáenz Peña realizaron dos encuentros de oración y formación, de los que participó y presidió la misa el obispo local, monseñor Hugo Barbaro. La primera cita reunió a los servidores, además contó con la presencia de coordinadores parroquiales y otros fieles que colaboran con la RCC. En ese contexto, se reflexionó sobre cómo aprovechar mejor el tiempo de gracia que regala la Iglesia a través de una intensa preparación hacia la Pascua, buscando de no separar la mirada de Jesús e imitándolo en el servicio. Con la presencia del predicador de la provincia de Misiones, Alberto Blanes, quien con mucha experiencia y docilidad fue guiando el encuentro con meditaciones que animaban a que cada bautizado mantenga un encuentro personal con el Señor Jesús y renueve su ser cristiano, profundizando en temas formativos sobre el ejercicio de la caridad de cada comunidad parroquial. El segundo encuentro tuvo lugar los días 21, 22 y 23 de abril y estuvo dirigido a jóvenes. Con el lema: "Correrán ríos de agua viva", los jóvenes de distintas parroquias de la diócesis reafirmaron su identidad de ser cristianos, en la Iglesia y para servir en ella. La guía de reflexiones estuvo a cargo de María Ojeda, de Resistencia, y Belén Mura, de Formosa, cooperadoras del movimiento de RCC en sus diócesis. Monseñor Barbaro pudo saludar a los referentes y dialogar con los participantes, y presidió la misa. En la celebración con los jóvenes resaltó la alegría de celebrar la Pascua, el milagro más grande de Jesús que fue la resurrección. Llamó a cada uno a buscar cada día esta presencia viva del Señor, cuidando el trato personal con Él a través de la oración y los sacramentos. Además animó a cada uno a dejar que Jesús vaya transformando su vida, en las acciones concretas, en las actividades cotidianas, sobre todo en una nueva forma de pensar y actuar, así como Jesús enseña. Por último, monseñor Barbaro invitó a todos a tener un trato muy cercano con la Virgen, ella, alegre por la resurrección de su Hijo, lo sigue anunciado también hoy, y es la persona más indicada para mostrar el camino hacia su Hijo. Tanto el obispo, como varios sacerdotes, dedicaron un buen tiempo a la charla con los jóvenes y sobre todo a impartir el sacramento de la Reconciliación. Ambos grupos regresaron a sus respectivas comunidades con el compromiso de continuar con distintas actividades de evangelización.+