La Academia del Plata incorporó al Dr. Eduardo A. Sambrizzi

  • 6 de abril, 2017
  • Buenos Aires (AICA)
La Academia del Plata celebró en el auditorio Hno. Sixto del Colegio Champagnat una sesión académica extraordinaria en la que fue incorporado como académico de número el Dr. Eduardo Sambrizzi. Las palabras de apertura del acto, que se llevó a cabo el 23 de marzo, fueron pronunciadas por el presidente de la academia, Dr. Ludovico Videla, quien entregó el diploma al Dr. Sambrizzi y presentó en nombre del Dr. Juan Luis Gallardo al nuevo académico, reconociendo su trayectoria, su creación intelectual y su compromiso en defensa de la vida humana y la familia.
La Academia del Plata celebró en el auditorio Hermano Sixto del Colegio Champagnat una sesión académica extraordinaria en la que fue incorporado como académico de número el doctor Eduardo Antonio Sambrizzi. Las palabras de apertura del acto, que se llevó a cabo el 23 de marzo, fueron pronunciadas por el presidente de la academia, doctor Ludovico Videla, quien entregó el correspondiente diploma al doctor Sambrizzi y presentó en nombre del doctor Juan Luis Gallardo al nuevo académico, haciendo un reconocimiento de su trayectoria, de su creación intelectual y, en lo personal, destacando su compromiso en defensa de la vida humana y de la familia. Tras agradecer a las autoridades académicas, el doctor Sambrizzi pronunció su discurso de incorporación que trató de "La eugenesia de ayer y de hoy". El doctor Sambrizzi comenzó por recordar la vida de Pedro Goyena -cuyo sitial ocupa el nuevo académico-, del que destacó, entre otros aspectos, la defensa de la familia y de la vida humana desde la concepción. Luego pasó al desarrollo del tema relativo a la eugenesia. El análisis practicado al respecto fue muy amplio, pues no solo se ocupó del desarrollo del pensamiento eugenésico en la antigüedad, incluyendo a Platón, sino que además analizó el tema desde el siglo XIX, época en la que a partir de los estudios de Francis Galton -que acuñó el término eugenesia y desarrolló una teoría al respecto-, se ha considerado que la eugenesia se desarrolló como una ciencia, lo que luego utilizaron distintos países donde se había hecho fuerte el puritanismo protestante, para sancionar disposiciones legales de carácter eugenésico. Entre ellos, Alemania, que desde comienzos del año 30 del siglo pasado aceptó el pensamiento eugenésico, llevándolo a partir del nacionalsocialismo alemán al extremo del racismo y la discriminación, en su sentido peyorativo más abyecto. El doctor Sambrizzi se ocupó también de las nuevas y actuales prácticas eugenésicas ?cuyo desarrollo consideró sumamente peligroso, además de violatorio de claras normas morales enraizadas en el derecho natural-, al estar orientadas a la modificación o a la mejora genética del ser humano por medio de la acción o la experimentación sobre las células germinales o sobre el embrión o el feto, o la persona ya nacida. A este respecto puso de relieve lo expresado por el Premio Nobel Marshall W. Nirenberg, sobre la dificultad de valorar adecuadamente las consecuencias a largo plazo de tales alteraciones en la especie humana, o de que se puedan formular metas adecuadas, o inclusive de que se puedan resolver los problemas éticos y morales que surgirán. Entre otros, por la discriminación a que puede dar lugar la aplicación de tales técnicas, que han sido desarrolladas a partir de la aplicación de las técnicas de la fecundación in vitro, o de prácticas similares. También recordó el cuestionamiento que expresó la Iglesia en diversos documentos sobre dicha especie de cuestiones, salvo que estas nuevas prácticas respeten la vida y la integridad del embrión humano y se encuentren orientados hacia su custodia o su curación; aunque ha dejado en claro su oposición a los procedimientos de procreación asistida. Sin perjuicio de lo que resulta de lo expresado, Sambrizzi afirmó que, a su juicio, no todas las acciones eugenésicas son cuestionables, pues todo lo que se haga para mejorar la especie humana mediante el desarrollo de acciones sanitarias para la prevención de enfermedades o para tratar de lograr su curación ?que son actos tendientes a dicha mejora-, constituyen actos eugenésicos moralmente admisibles, no siendo, en consecuencia, susceptibles de crítica. Dr. Eduardo Antonio Sambrizzi Abogado y doctor en Derecho Civil. Exprofesor de Derecho Civil en distintas universidades del país. Ha escrito más de doscientos artículos y notas en revistas jurídicas del país y del exterior, tanto de Latinoamérica como de Europa, además de quince libros sobre su especialidad (uno es un Tratado de Derecho de Familia en 8 tomos), dos de los cuales fueron premiados por la Academia Nacional de Derecho y Ciencias Sociales. Es miembro titular de la Academia Nacional de Derecho y Ciencias Sociales de la ciudad de Buenos Aires y director de la sección de Familia y Bioderecho del Instituto de Derecho Civil de esa academia. También es académico de número de la Academia del Plata y académico honorario de la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación de Granada, España. Ha sido presidente de la Corporación de Abogados Católicos. Actuó como jurado del Consejo de la Magistratura para la selección de jueces nacionales en lo civil, y en distintos concursos para la designación de profesores en la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires (UBA), y para evaluar tesis doctorales en distintas universidades del país y del exterior.+