Buenos Aires homenajeó al cardenal Copello

  • 10 de febrero, 2017
  • Buenos Aires (AICA)
Al cumplirse el 50º aniversario del fallecimiento del cardenal Santiago Luis Copello, se celebró ayer en la catedral de Buenos Aires una misa por su eterno descanso y en su memoria. La misa fue presidida por el arzobispo auxiliar de Buenos Aires, monseñor Joaquín Sucunza y concelebrada por el presbítero Alejandro Russo, rector de la catedral primada de Buenos Aires.
Con motivo de cumplirse 50 años del fallecimiento del cardenal Santiago Luis Copello, primer cardenal de América Hispana, se celebró una misa en su honor, que tuvo lugar ayer, jueves 9 de febrero, en la catedral de Buenos Aires. Fue presidida por el arzobispo auxiliar de Buenos Aires, monseñor Joaquín Sucunza, y concelebrada por el presbítero Alejandro Russo, rector de la catedral primada de Buenos Aires. En su homilía, monseñor Sucunza destacó la actitud pastoral del cardenal, que supo leer los signos de los tiempos y llevar a Dios a las periferias, dedicándose a la creación de numerosas parroquias y al sostenimiento de muchas obras laicales. Participaron de la ceremonia familiares del cardenal Copello y el secretario de Culto, Santiago de Estrada. Durante la celebración se anunció el homenaje central, que se llevará a cabo el 23 de julio en ocasión de la fiesta del Apóstol Santiago (que se celebra el 25 de julio), en la catedral de Buenos Aires. Al finalizar la misa se descubrirá una placa recordatoria de quien fuera el 20º obispo de Buenos Aires, 6º arzobispo de esta sede primada y primer cardenal de América Hispana y se presentará la edición de sus memorias, como una justa reparación histórica a su figura. La ceremonia central será presidida por el arzobispo de Buenos Aires y primado de la Argentina, cardenal Mario Aurelio Poli. Para la organización del acto se constituirá una comisión de homenaje. Datos biográficos del cardenal Copello Santiago Luis Copello nació en San Isidro el 7 de enero de 1880. Realizó sus estudios primarios y secundarios en Buenos Aires, en el Colegio San José de los Padres Betharramitas. Cursó sus estudios eclesiásticos en el seminario mayor San José, de La Plata, y luego en la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma, donde se doctoró en Filosofía en 1899, y en Teología en 1903, año en que regresó al país. Fue ordenado sacerdote el 28 de octubre de 1902 y ejerció su ministerio sacerdotal en la diócesis de La Plata desde 1903 hasta 1918. El 8 de noviembre de 1918 el papa Benedicto V lo nombró obispo titular de Aulón y auxiliar de la diócesis de La Plata. Recibió la consagración episcopal el 30 de marzo de 1919 de manos del obispo de La Plata, monseñor Juan Nepomuceno Terrero, y de los obispos Francisco Alberti y José Orzali como coconsagrantes. El 15 de mayo de 1928 el papa Pío XI lo designó obispo auxiliar de la arquidiócesis de Buenos Aires, y el 20 de septiembre de 1932 el mismo Papa lo nombró arzobispo de Buenos Aires. El 16 de diciembre de 1935 Pío XI lo creó cardenal. Fue el primer cardenal que nació y ejerció el sacerdocio en Hispanoamérica. El 29 de enero de 1936 fue proclamado Cardenal Primado de la Argentina. Como cardenal participó de tres cónclaves: en 1939 cuando se eligió a Pío XII; en 1958 en el que se eligió a Juan XXIII; y en 1963 donde se eligió a Pablo VI. De 1962 a 1965 participó del Concilio Vaticano II. Tras 26 años de servicio como arzobispo de Buenos Aires, el 25 de marzo de 1959 renunció y fue nombrado Canciller Apostólico con residencia en Roma, donde falleció el 9 de febrero de 1967 de un infarto al corazón en la clínica Villa Estuardo, de Roma, a los 87 años que acababa de cumplir el 7 de enero. En la basílica de San Pedro, con la asistencia del papa Pablo VI, de 22 cardenales y de unas 1.500 personas, entre las que se hallaba el canónigo monseñor Carlos R. Copello, sobrino del extinto cardenal, celebró la solemne misa exequial el cardenal Secretario de Estado Amleto Cicognani. Al término de la conmovedora ceremonia Pablo VI bendijo el túmulo. Mensaje de condolencia de Pablo VI "En estos momentos en que conmueve nuestro espíritu la dolorosa noticia del piadoso fallecimiento del cardenal Santiago Luis Copello, canciller de la Santa Iglesia Romana, antes pastor eximio de esa arquidiócesis, que ilustrara con sus preclaras virtudes y encomiable celo, expresamos a todo el querido pueblo argentino el testimonio de nuestro vivo pesar por la pérdida de tan ilustre hijo y colaborador nuestro, mientras ofreciendo sufragios por su eterno descanso enviamos a ese noble país una especial bendición apostólica".+