La Eucaristía como fuente y cumbre de toda actividad misionera

  • 17 de junio, 2016
  • San Miguel de Tucumán (AICA)
¿Cómo está la misión en nuestras comunidades?, ¿Qué nos motiva a llevar adelante una misión?, ¿Para qué una misión?, fueron algunas de las preguntas que se plantearon durante el encuentro misionero, este sábado 17 de junio, en el marco del XI Congreso Eucarístico Nacional que se está llevando a cabo en la ciudad de San Miguel de Tucumán.
[img]http://www.aica.org/subidas/1810.jpg[/img]En el marco del XI Congreso Eucarístico Nacional, que se está llevando a cabo en la ciudad de San Miguel de Tucumán, tuvo lugar un taller misionero bajo el tema: "Eucaristía y Misión". El obispo auxiliar de Comodoro Rivadavia e integrante de la Comisión Episcopal de Misiones, monseñor Fernando Croxatto y el presbítero Dante De Sanzzi, director de Obras Misionales Pontificias fueron los encargados de coordinar este taller que contó con la participación de 500 congresistas. "Ante el cambio de época que estamos viviendo, surge una nueva cuestión social. Siempre hubo dificultades pero hoy surgieron formas inéditas de pobreza y exclusión", se planteó al comienzo del debate y se explicó que "se trata de esclavitudes modernas que desafían de un modo nuevo a la creatividad, la participación y la organización del compromiso cristiano y ciudadano". "Como señala el Documento de Aparecida, señalaron los coordinadores, hoy los excluidos no son solamente ´explotados´ sino que han llegado a ser ´sobrantes y desechables´. Ante esta cuestión se subrayó que "la persona nunca puede ser instrumento de proyectos de carácter económico, social o político". Para agregar luego que cada parroquia no puede estar ajena a los grandes sufrimientos que vive nuestra gente y que, con mucha frecuencia, son pobrezas escondidas. "Toda auténtica misión -explicaron- unifica la preocupación por la dimensión trascendente del ser humano y por todas sus necesidades concretas, para que todos alcancen la plenitud que Jesucristo ofrece". En cuanto a la centralidad de la Eucaristía, se planteó el problema del insuficiente número de sacerdotes y su mala distribución que imposibilitan que muchas comunidades no puedan participar regularmente en la celebración de la Eucaristía. Muchos sacerdotes presentes recordaron que "la Eucaristía hace a la Iglesia, y nos preocupa, dijeron, la situación de miles de estas comunidades privadas de la Eucaristía dominical por largos períodos de tiempo". Nuevamente se reiteró el documento de Aparecida que indica que "la Eucaristía es el lugar privilegiado del encuentro del discípulo con Jesucristo. Con este Sacramento, Jesús nos atrae hacia sí y nos hace entrar en su dinamismo hacia Dios y hacia el prójimo" y se subrayó que "es principio y proyecto de misión del cristiano y la madurez del discípulo misionero se da en la participación activa de la Eucaristía del domingo". Con respecto al itinerario formativo de los discípulos misioneros, destacaron promover la pastoral del domingo, haciendo hincapié en alimentar el espíritu misionero con la participación de la Eucaristía dominical y asimismo valorizar la piedad popular. "El discípulo misionero, señalaron, tiene que ser sensible a la piedad popular, saber percibir sus dimensiones interiores y sus valores innegables". En su Palabra y en los sacramentos, Jesús nos ofrece un alimento para el camino. La Eucaristía es el centro vital del universo, capaz de saciar el hambre de vida y felicidad. Sin dejar de detener nuestra mirada en María y reconocer en ella una imagen perfecta de la discípula misionera, concluyeron. [img]http://www.aica.org/subidas/1836.jpg[/img] Testimonio Como corolario, las hermanas Marta y María Celeste, de la congregación misioneras de San Roque de la localidad chaqueña El Sauzalito, compartieron su testimonio misionero. Las religiosas contaron que comenzaron recorriendo comunidades y parajes en el impenetrable chaqueño llevando, a través de la Adoración Eucarística, un Jesús vivo, cercano, a parajes del monte donde nunca habían tenido la posibilidad de vivir esta experiencia de fe. La Celebración Eucarística, impartir los sacramentos, es poco habitual dada las distancias, el mal estado de los caminos y la imposibilidad de una adecuada atención pastoral por la escasez de sacerdotes. Por su parte el director de Obras Misionales Pontificias, padre Dante De Sanzzi, comentó a AICA su apreciación acerca del encuentro: "Noté que era conveniente comenzar el taller de Eucaristía y misión, haciendo reflexionar a los congresistas sobre su experiencia viva con Jesús Sacramentado. La misión será fructífera a partir del encuentro en el sagrario y en la participación de la Santa Misa", explicó. "Muchos no comulgan, señaló el padre Dante, la oración es muy apurada y la espiritualidad misionera es la clave para entender que esta no es una pastoral parroquial más, sino la esencia de la Iglesia". "Que el Pan Vivo bajado del Cielo sea el alimento para nuestros cuerpos y nuestras almas; y que lo recibamos con dignidad para darlo a los demás", concluyó.+ [img]http://www.aica.org/subidas/1844.jpg[/img]