Bajo el lema "Despertar la conciencia de la misión", comenzó la Asamblea General de Obras Misionales

  • 31 de mayo, 2016
  • Ciudad del Vaticano
Comenzó en Roma, el lunes 30 de mayo, la Asamblea General de las Obras Misionales Pontificias (OMP) que con el lema "Despertar la conciencia de la misión. Las OMP al servicio de las Iglesias jóvenes"-, reune a más de 100 directores nacionales de las OMP del mundo y al presidente y secretarios generales de las cuatro Obras Pontificias: de la Propagación de la Fe, de Infancia Misionera, de San Pedro Apóstol y Pontificia Unión Misional, que integran las OMP. La asamblea está presidida por el cardenal Fernando Filoni, Prefecto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, el dicasterio misionero de la Santa Sede del que dependen las Obras Misionales, y del presidente de las OMP, monseñor Protase Rugambwa.
Comenzó en Roma, el lunes 30 de mayo, la Asamblea General de las Obras Misionales Pontificias (OMP) que con el lema "Despertar la conciencia de la misión. Las OMP al servicio de las Iglesias jóvenes"-, reune a más de 100 directores nacionales de las OMP del mundo y al presidente y secretarios generales de las cuatro Obras Pontificias: de la Propagación de la Fe, de Infancia Misionera, de San Pedro Apóstol y Pontificia Unión Misional, que integran las OMP. La asamblea está presidida por el cardenal Fernando Filoni, Prefecto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, el dicasterio misionero de la Santa Sede del que dependen las Obras Misionales, y del presidente de las OMP, monseñor Protase Rugambwa. En sus palabras inaugurales el cardenal Filoni señaló que "el Espíritu Santo y sus signos de los tiempos nos llaman a superar las diferencias y las separaciones eclesiales, que son artificiales, entre las tierras de misión y los países cristianos, entre las iglesias que envían misioneros y las iglesias que los reciben. La evangelización, tanto en sus fases iniciales de nueve anuncio, como en sus etapas más avanzadas de pastoral y evangelización ordinaria, es transversal a todas las Iglesias del Norte y del Sur, del Este y del Oeste". Recordando el tema de la Asamblea, el purpurado dijo que "las Iglesias jóvenes, a las que las OMP pretenden ofrecer un servicio adecuadamente misionero siempre, representan una fuente imprescindible para despertar la conciencia de la misión en todos los cristianos". El cardenal prefecto recordó asimismo que la Asamblea General de este año cae en el centenario de la fundación de una de las cuatro Obras Misionales, la Pontificia Unión Misionera (PUM), establecida por inspiración del beato Padre Paolo Manna, PIME. "La intuición carismática misionera de la PUM, indicó el cardenal Filoni, sigue siendo válida actualmente y es fuente viva para un replanteamiento y una reforma radical, como era y todavía lo es, de su finalidad intrínseca: todos los fieles, todo el Pueblo de Dios, en virtud del bautismo, son responsables de la misión universal, y de la misión ad gentes de la Iglesia". El centenario de la PUM, además de una dimensión orante con la peregrinación a la tumba del Padre Manna, también debe marcar el inicio de un proceso de replanteamiento de la obra: "no hay que temer la necesidad urgente de reformar juntos la Pontificia Unión Misionera y con ella dar impulso a las otras Obras Pontificias", subrayó el cardenal, señalando que su "debilitamiento de naturaleza y de papel forman parte de un preocupante enfriamiento eclesial en lo referente a la misión, la formación misionera y la evangelización como tal". Más adelante el cardenal explicó: "A las iglesias de antigua tradición les cuesta tener más pasión e interés por el anuncio del Evangelio en las tierras e iglesias más allá de sus propias fronteras. Las iglesias más jóvenes parecen, a veces, demasiado preocupadas por organizarse administrativamente replegándose sobre sí mismas excesivamente. Los fieles y los pastores cada vez tenemos más difícil, bajo el peso de los retos culturales, económicos y religiosos actuales, el sentirnos preparados y fuertes para salir a las periferias existenciales y territoriales que van mucho más allá de las clasificaciones habituales sociológicas y económicas". En esta renovación de la conciencia de la misión, ahora se podría asignar a la PUM una "tarea de educación continua y misionera al servicio de las Iglesias jóvenes en sus más diversas instancias. Los organismos, asignados a la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, con fines de formación misionera, podrían servir, de una manera nueva, a la animación misionera de las iglesias de antigua tradición cristiana, gracias a la labor de formación permanente misionera que la PUM, junto con las otras tres Obras Pontificias, de las que es el alma, podría ofrecer a las Iglesias jóvenes". El cardrnsl Filoni también expresó el deseo de que "los trabajos de esta Asamblea General sean profícuos y sirvan para renovar el compromiso para que podamos despertar la conciencia de la misión hoy, gracias a nuestro servicio como OMP en favor de las jóvenes Iglesias". Programa de la Asamblea General de la OMP La primera parte de esta Asamblea contará con cinco talleres. El primero se centrará en las "OMP al servicio de las jóvenes Iglesias"; le seguirá, "renovando la naturaleza y la misión de la PUM"; el tercero incidirá en "los desafíos de la pluralidad religiosa y de las preocupantes amenazas del integrismo étnico, religioso y cultural"; el siguiente taller profundizará en "contextos de pobreza que desafían periferias, inmigrantes, prófugos, perseguidos y refugiados"; y el último sobre "los nuevos contextos culturales y pastorales que se refieren al matrimonio y a la familia". Se tendrá también un recuerdo especial del beato Paolo Manna, en el 100º aniversario de la Pontificia Unión Misional que él fundó. Se viajará a Ducenta, lugar donde el beato abrió uno de los seminarios de misiones extranjeras que tantos misioneros aportó a la Iglesia. Se presentarán además los informes de las cuatro Obras Pontificias, a cargo de cada secretario respectivo, además de presupuestos y previsiones para el futuro. Se asignarán las ayudas para sostener en sus necesidades a los territorios de misión, que engloban prácticamente a la totalidad de la Iglesia católica en África, las islas de Oceanía con Papúa-Nueva Guinea a la cabeza, y Asia, salvo países como Filipinas y algunas diócesis de América Latina. Las Obras Misionales Pontificias tienen, como uno de sus principales objetivos, la búsqueda de medios materiales y personales para apoyar a la Iglesia misionera. El carácter universal de esta búsqueda de medios por parte de las Obras Misionales Pontificias se verá con claridad en esta Asamblea. Todos los países aportan según sus posibilidades creándose un Fondo Universal de Solidaridad que recoge, desde las pequeñas pero muy meritorias aportaciones de países como Kenia o Angola, a las ya de mayor cuantía de países europeos o de Estados Unidos. Es este Fondo Universal de Solidaridad el que financia los cientos de proyectos de ayuda a los territorios de misión que se aprobarán en la Asamblea. Así, es toda la Iglesia universal la que ayuda en el sostenimiento de los 1111 territorios de Misión. La Asamblea General de OMP 2016 se clausurará con una audiencia con el papa Francisco el sábado 4 de junio.+