Desde la Argentina profunda transmiten sus sueños a los políticos

  • 13 de octubre, 2015
  • Huachana (Santiago del Estero)
A fines de julio de este año miles de peregrinos se reunieron en el monte santiagueño para celebrar la fiesta de la Virgen de Huachana. En tiempo de elecciones, los sacerdotes del santuario desplegaron una bandera argentina de unos diez metros para que los peregrinos anotaran sus sueños para la Argentina. Sus petitorios fueron entregados a varios políticos para que se hagan eco del sentir de la gente.
A fines de julio de este año miles de peregrinos se reunieron en el monte santiagueño para celebrar la fiesta de la Virgen de Huachana. En tiempo de elecciones, los sacerdotes del santuario desplegaron una bandera argentina de unos diez metros para que los peregrinos anotaran sus sueños para la Argentina. Los sacerdotes locales y muchos otros que viajan para acompañar a los peregrinos difundieron recientemente esos "sueños" para que las personas que ejercerán la conducción del país hagan posibles "los anhelos profundos de nuestra Argentina del interior". "Sabemos que muchas voces no son escuchadas. Necesitamos crecer en una Patria más federal. Aquí va nuestro pequeño aporte en la construcción de este sueño común, de una Patria con más oportunidades para todos, en donde todas las voces, sueños, anhelos y deseos puedan ser escuchados", contó Joaquín Pousadela, un seminarista porteño que viaja anualmente a Huachana. Entre los deseos más repetidos, aparecen el reclamo de paz, verdad, justicia y libertad; igualdad, amor, solidaridad. "Que no falte el pan a ninguno" es otro de los pedidos. "Que vivamos juntos y como hermanos", es otra de las súplicas dejadas a los pies de la Virgen. "Queremos una patria libre de violencia", "quiero una patria igualitaria para todos", "Trabajo para los jóvenes, para que no tengan que emigrar", "Que no roben lo que no es de ellos, así seremos felices todos", y "Que no haya perversión ni corrupción", decían algunos de los mensajes. "Sueño con una patria justa donde prime la cultura del trabajo, con educación y sin violencia, sin drogas ni delincuencia", expresó uno de los peregrinos. Los sacerdotes y colaboradores de la fiesta se encargaron de llevar estos sueños a los políticos, para que se hagan eco del sentir de la gente.+