Numerosos devotos expresaron su devoción a Santa Rosa de Lima

  • 31 de agosto, 2015
  • Buenos Aires (AICA)
Numerosos devotos expresaron este 30 de agosto su devoción a Santa Rosa de Lima, patrona de América Latina y jurada de la Independencia argentina, al participar de la procesión con la imagen de la santa que se venera en la basílica del barrio porteño de Balvanera. Las fiestas patronales en el templo de avenida Belgrano y Pasco, con misas y bendiciones, llevaron por lema "Con Santa Rosa, vayamos a las periferias". Acompañó a esta comunidad, de la que supo ser párroco, el cardenal Luis Héctor Villalba, arzobispo emérito de Tucumán.
Numerosos devotos expresaron este 30 de agosto su devoción a Santa Rosa de Lima, patrona de América Latina y jurada de la Independencia argentina, al participar de la procesión con la imagen de la santa que se venera en la basílica del barrio porteño de Balvanera. Las fiestas patronales en el templo de avenida Belgrano y Pasco, con misas y bendiciones de 8 a 20.30, llevaron por lema "Con Santa Rosa, vayamos a las periferias". Acompañó a esta comunidad, de la que supo ser párroco, el cardenal Luis Héctor Villalba, arzobispo emérito de Tucumán. El momento culminante fue la procesión por las calles del barrio con la imagen de la santa, que fue llevada en unas andas por los 28 integrantes de la Hermandad del Señor de los Milagros, en su mayoría de origen peruano, que la balanceaban a los lados a modo de saludo. Luego de recorrer unas 14 cuadras a paso lento, la imagen regresó a la basílica, donde fue recibida por los devotos, en su mayoría inmigrantes de nacionalidad peruana, con pañuelos, agitar de banderas y aplausos. Los fieles porteños que asistieron a las celebraciones no padecieron la lluvia con la cual se suele asociar a Santa Rosa, dado que se vivió una jornada primaveral y sin pronósticos de tormentas en la ciudad. En este sentido, el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) recordó que el fenómeno climático coincidió sólo 16 veces con la fecha religiosa desde 1861. Rosas rojas con la estampa de la mística peruana e imágenes, además de rosarios, se vendieron en cercanías del templo. A Santa Rosa se la vincula con la lluvia porque, según la leyenda popular, oró con fervor y produjo una tormenta que forzó la retirada de las naves del pirata holandés Spillberg quien, tras atacar el puerto peruano de El Callao, exigía la rendición de Lima. Si bien su festividad fue fijada para la Iglesia universal el 23 de agosto, el Episcopado Argentino y otros del continente obtuvieron la autorización para celebrarla el 30 de ese mismo mes, fecha en la que se la celebró desde siempre. El 14 de setiembre de 1816 el Congreso de Tucumán, a propuesta del diputado Fray Justo Santa María de Oro, la declaró patrona jurada de la Independencia argentina.+