Una guía de actuación en casos de abusos sexuales

  • 5 de agosto, 2015
  • Buenos Aires (AICA)
La Conferencia Episcopal Argentina presentó hoy una serie de orientaciones para actuar en caso de denuncias de abusos sexuales en los que los acusados sean clérigos y las presuntas víctimas sean menores de edad. En el documento los obispos advierten que el abuso sexual de menores de edad es "un pecado grave que clama al cielo" y reviste "particular gravedad" cuando es cometido por un clérigo. El protocolo de actuación, aprobado en la 105ª asamblea plenaria de abril de 2013, fue difundido a través de las redes sociales y esta tarde será presentado formalmente por el secretario general del Episcopado, monseñor Carlos Malfa, durante un acto en la Universidad Católica Argentina (UCA).
La Conferencia Episcopal Argentina presentó hoy una serie de orientaciones para actuar en caso de denuncias de abusos sexuales en los que acusados sean clérigos y las presuntas víctimas sean menores de edad. El protocolo de actuación, aprobado en la 105ª asamblea plenaria de abril de 2013, fue difundido a través de las redes sociales y esta tarde será presentado formalmente por el secretario general del Episcopado, monseñor Carlos Malfa, durante un acto en la Universidad Católica Argentina (UCA). Los obispos aseguraron en el documento que el abuso sexual de menores de edad es "un pecado grave que clama al cielo" y advirtieron que ese delito, tanto en el ordenamiento jurídico canónico como en el del Estado, reviste particular gravedad cuando es perpetrado por un clérigo. "Cuando el abuso sexual de un menor es cometido por un clérigo, el delito reviste una particular gravedad. Además de lesionar la dignidad e integridad de la víctima, implica la profanación del ministerio sagrado conferido por el sacramento del orden", subrayaron. Los obispos argentinos dijeron compartir la preocupación del Papa en esta materia y adhirieron "sin reservas a los criterios de transparencia y de responsabilidad expresados en numerosas oportunidades por la Santa Sede con respecto al abuso sexual de menores". Asimismo, manifestaron su "máxima disposición a cooperar con el conjunto de la sociedad y con las competentes autoridades nacionales y provinciales con respecto a esta cuestión". El Episcopado explicó que el objetivo de este protocolo "es orientar a los obispos en los supuestos en los "que deban intervenir en sus respectivas jurisdicciones, por haber recibido noticias verosímiles de la comisión de alguno de los delitos aquí contemplados". En la primera parte, las Líneas-guía "están enfocadas desde una perspectiva práctica exclusivamente jurídica. Por esa razón, su referencia inmediata es la legislación canónica vigente contenida en el Motu Proprio Sacramentorum Sanctitatis Tutela, en su texto ordenado del 21 de mayo de 2010 (SST 2010), y las normas penales correspondientes del ordenamiento jurídico de la Argentina". En tanto, en la segunda parte, se ofrecen algunas orientaciones pastorales, que se recomienda tener en cuenta como "una ayuda sumada a la experiencia pastoral ya adquirida por los obispos y sus colaboradores inmediatos, como también a la doctrina secular de la misma Iglesia". "Reconocemos y valoramos que los sacerdotes sirven con celo apostólico al Pueblo de Dios que peregrina en la Argentina. La conducta inmoral de unos pocos no descalifica ni desmerece el abnegado servicio de la mayoría. Esperamos que estas Líneas guía sean un aporte a un mejor ejercicio del ministerio sacerdotal en la misión de toda la Iglesia", concluyeron en el preámbulo.+ Texto completo de la guía