El encuentro más esperado: Emma y Francisco

  • 23 de abril, 2015
  • Ciudad del Vaticano
Con su característico chaleco naranja con el que circuló en su peregrinar por toda la Argentina, Emma Morisini, la abuela peregrina de 91 años, se encontró con el papa Francisco. El emotivo encuentro tuvo lugar este miércoles durante la audiencia general. "Hace muchos años que estoy caminando hacia los santuarios de todo el mundo siempre con la intención de orar por los jóvenes, las familias y el papa Francisco", explicó la anciana al Santo Padre.
Con su característico chaleco naranja con el que circuló en su peregrinar por toda la Argentina, Emma Morisini, la abuela peregrina de 91 años, se encontró con el papa Francisco. El emotivo encuentro tuvo lugar este miércoles durante la audiencia general. "Hace muchos años que estoy caminando hacia los santuarios de todo el mundo siempre con la intención de orar por los jóvenes, las familias y el papa Francisco", explicó la anciana al Santo Padre. Emma pudo contar su historia al Papa: "Yo camino sola, rezando, con un carrito donde guardo el pan y el agua. Pero en el camino me encuentro con tantas personas maravillosas que optan por caminar un tramo de la ruta conmigo". El Papa abrazó a la abuela Emma y le dio bendiciones por su accionar. Asimismo le dijo "no deje de rezar y pedir por los jóvenes, las familias y los enfermos". Emma Morosini es italiana y tiene 91 años. En marzo de este año llegó hasta la basílica de Nuestra Señora de Luján después de recorrer más de 1.200 kilómetros a pie, para pedirle a la Patrona de la Argentina por la juventud y la paz en el mundo. La anciana tiene una contextura física pequeña y suele caminar con zapatillas deportivas, anteojos de sol, un gorro y un chaleco color naranja para ser vista por los conductores en las carreteras. Viaja empujando un pequeño carrito en el que lleva pan, agua y leche en polvo. Emma ya hizo largas peregrinaciones en Polonia, Israel, México y Brasil.+