Mons. Lozano: Jesús, María y José, presentes en cada familia migrante

  • 29 de diciembre, 2019
  • San Juan (AICA)
Columna semanal del arzobispo de San Juan de Cuyo

El arzobispo de San Juan de Cuyo, monseñor Jorge Eduardo Lozano, reflexionó sobre la huida de la Sagrada Familia a Egipto, convirtiendo a Jesús, María y José en perseguidos de su tiempo por la violencia y la ambición del poder de turno.

El prelado pidió contemplar e imaginar el momento, y describió: “Pocos días habían pasado del largo camino de Nazaret a Belén. También escaso fue el tiempo de estadía en esa cueva del nacimiento que significó como el consuelo de Dios… y ya había que salir escapando del poder y la violencia”.

“La frontera con Egipto estaba a unos 125 km de Belén y desde allí lo que hiciera falta recorrer para llegar a otro poblado. Tal vez el oro ofrecido por los magos les ayudó a costear algunos gastos. La huida era urgente. Tuvieron que partir de noche, sin descansar lo suficiente. Salieron a un camino amenazante e incierto. Sin un mapa, sin indicaciones precisas. Sin seguridades más que la confianza que da la fe y la misión”, agregó.

“Al llegar tuvieron que convivir con un pueblo que hablaba otro idioma, una cultura diversa, otra religión”, recordó, y añadió: “Es probable que se hayan encontrado con otros judíos también escapados de su patria”.

Monseñor Lozano invitó a imaginar también las dificultades para conseguir trabajo y encontrar un lugar para vivir, y las comparó con imágenes muy recientes de familias migrantes con sus niños en brazos, expulsadas de su tierra por razones políticas, religiosas, étnicas, o desastres ecológicos.

“En cualquiera de ellas está la Sagrada Familia de Nazaret vagando en busca de un refugio y condiciones de vida digna”, sostuvo.

“Jesús, José y María recorren el camino de los pobres que andan a la intemperie y el desamparo. Dios envió a su Hijo a un pueblo marginal y compartió la suerte de los humildes y desheredados. El sueño de una Patria que acoja está lejos. Las condiciones mínimas para una vida en paz no están a la alcance de ellos en este tiempo. Hay que salvar al Niño, protegerlo del odio y el rencor, de la muerte que lo busca”, precisó.

Monseñor Lozano señaló que este domingo se celebra la fiesta de la Sagrada Familia y se proclama el Evangelio de la huida a Egipto que muestra “esta condición de fragilidad que experimentó Jesús ya desde sus primeros días de vida”.+