"¡Basta ya! No queremos más sangre", claman los obispos de México

  • 13 de noviembre, 2014
  • Ciudad del México
"¡Basta ya! No queremos más sangre. No queremos más muertes. No queremos más desparecidos. No queremos más dolor ni más vergüenza", claman en una declaración final los obispos que participaron de la 98ª Asamblea de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM). Los prelados manifestaron de este modo su solidaridad con las familias de los 43 estudiantes desaparecidos en Gerrero y que según las autoridades fueron asesinados por grupos vinculados a los narcotraficantes.
Los obispos que participan de la 98ª Asamblea de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), dieron a conocer un mensaje final al pueblo de Dios titulado "¡Basta ya!", en el que recuerdan a los 43 estudiantes desaparecidos en Guerrero y que según las autoridades fueron asesinados por grupos vinculados a los narcotraficantes. "¡Basta ya! No queremos más sangre. No queremos más muertes. No queremos más desparecidos. No queremos más dolor ni más vergüenza". Los obispos señalan que comparten con sus compatriotas "la pena y el sufrimiento de las familias cuyos hijos están muertos o están desaparecidos en Iguala, en Tlatlaya y que se suman a los miles de víctimas anónimas en diversas regiones de nuestro país". "Nos unimos al clamor generalizado por un México en el que la verdad y la justicia provoquen una profunda transformación del orden institucional, judicial y político, que asegure que jamás hechos como estos vuelvan a repetirse". Los obispos afirman asimismo que "con tristeza reconocemos que la situación del país ha empeorado, desatando una verdadera crisis nacional. Muchas personas viven sometidas por el miedo, la desconfianza al encontrarse indefensas ante la amenaza de grupos criminales y, en algunos casos, la lamentable corrupción de las autoridades. Queda al descubierto una situación dolorosa que nos preocupa y que tiene que ser atendida por todos los mexicanos, cada uno desde su propio lugar y en su propia comunidad". "En nuestra visión de fe, estos hechos hacen evidente que nos hemos alejado de Dios; lo vemos en el olvido de la verdad, el desprecio de la dignidad humana, la miseria y la inequidad crecientes, la pérdida del sentido de la vida, de la credibilidad y confianza necesarias para establecer relaciones sociales estables y duraderas". "En medio de esta crisis vemos con esperanza el despertar de la sociedad civil que, como nunca antes en los últimos años, se ha manifestado contra la corrupción, la impunidad y la complicidad de algunas autoridades. Creemos que es necesario pasar de las protestas a las propuestas". Los prelados hacen votos para que "nadie esté como buitre esperando los despojos del país para quedar satisfecho. La vía pacífica, que privilegia el diálogo y los acuerdos transparentes, sin intereses ocultos, es la que asegura la participación de todos para edificar un país para todos". "Agradecemos al papa Francisco su cercanía y preocupación en estas circunstancias. Unidos a él, celebraremos el próximo 12 de diciembre la fiesta de Nuestra Señora de Guadalupe, haciendo una jornada de oración por la paz. Le pediremos su intercesión por la conversión de todos los mexicanos, particularmente la de quienes provocan sufrimiento y muerte". El comunicado lleva la firma del cardenal José Francisco Robles Ortega, arzobispo de Guadalajara y presidente de la CEM; y de monseñor Eugenio Lira Rugarcía, obispo auxiliar de Puebla y secretario general del Episcopado.+