Meriam Ibrahim, liberada del cautiverio y de la sentencia a muerte por su fe
- 23 de junio, 2014
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Jartúm (Sudán)
El Tribunal de Apelaciones de Jartum, en Sudán, canceló la condena a muerte de la joven madre cristiana Meriam Ibrahim y ordenó su liberación inmediata, según informó su abogado, para quien la decisión fue toda una sorpresa. La liberación de Meriam fue atribuida a la presión internacional sobre el sistema penitenciario y las condiciones inhumanas en las que se encuentran las personas carceladas en Sudán. Sin embargo, el suplicio no termina: fue demorada cuando se aprestaba a tomar un vuelo hacia los Estados Unidos.
El Tribunal de Apelaciones de Jartum, en la capital de Sudán, canceló este lunes 23 de junio la condena a muerte de la joven madre cristiana Meriam Ibrahim y ordenó su liberación inmediata, según informó su abogado, para quien la decisión fue toda una sorpresa.
Ibrahim fue puesta en libertad y se encuentra de nuevo en su hogar. La joven estuvo en la cárcel con sus dos hijos, uno de ellos recién nacido, por lo que la Justicia del país le había ofrecido dos años de vida para que pudiera amamantarlo.
La liberación de Meriam fue atribuida a la presión internacional sobre el sistema penitenciario y las condiciones inhumanas en las que se encuentran las personas carceladas en Sudán. Daniel Wani, el esposo de Meriam, incluso denunció que las autoridades penitenciarias "mantuvieron una cadena en sus piernas" al momento del parto y nacimiento del segundo hijo del matrimonio.
Wani no tuvo permiso para ver a su hija recién nacida hasta el día siguiente a su nacimiento y en compañía del abogado. Solo entonces el letrado pudo retirarle las cadenas puestas en sus piernas.
Meriam, de 27 años, fue condenada a muerte tras ser acusada de renunciar al Islam por tres personas que fraudulentamente aseguraron ser sus hermanos y su madre. La joven asegura ser cristiana, y haber sido criada como tal por su verdadera y fallecida madre, luego de que su padre musulmán las abandonara cuando ella tenía seis años.
Las autoridades islámicas la condenaron además a 100 latigazos por el delito de adulterio, pues su matrimonio con Daniel Wani no es reconocido como tal bajo la ley musulmana. Tras ser advertida por un religioso musulmán del peligro para su vida, y luego de habérsele ofrecido volver al Islam, Meriam aseguró: "Soy cristiana y seguiré siendo cristiana". Luego de este gesto, se le condenó a muerte.
El esposo de Meriam contó que, en una de sus visitas, su mujer le manifestó: "Me rehúso a cambiar. No voy a renunciar al cristianismo solo para que pueda vivir. Sé que podría seguir viva convirtiéndome en musulmana y sería capaz de velar por nuestra familia, pero necesito ser honesta conmigo misma".
Meriam retenida en Sudán. La situación de Meriam no es de tranquilidad hasta ahora. Este martes 24 de junio fue demorada en el aeropuerto de Jartúm cuando se disponía a tomar un vuelo hacia los Estados Unidos. Ahora su libertad depende de las gestiones de la embajada norteamericana, según informó el diario italaino Avvenire.+