Cáritas anima a trabajar por el bien común para superar la pobreza en todas sus formas

Campaña con motivo de la 3ª Jornada Mundial de los Pobres

Cáritas Argentina realiza, en la semana previa a la Jornada Mundial de los Pobres, que se celebra el 17 de noviembre, una campaña de concientización y visibilización de la realidad dolorosa que viven tantos hermanos.

Para Cáritas, esta Jornada tiene una importancia particular, porque la misión de sus miles de voluntarios es acompañar y promover a las personas en situación de pobreza para lograr su inclusión social. En ese sentido, trabajan para transformar sus vidas a través de la ayuda material concreta, la presencia, la contención y el acompañamiento.

Desde las comunidades, observan cómo cada vez más hermanos, niños, jóvenes y abuelos están sufriendo la realidad de no tener para vivir dignamente, ni lo suficiente para comer y tampoco acceso a la salud. Por eso expresan que el aumento de la pobreza es algo que nos duele y nos avergüenza. Los índices oficiales reflejan pálidamente la realidad que los voluntarios de Cáritas viven en los comedores, merenderos y centros comunitarios, en el conurbano bonaerense y las grandes ciudades del interior. A esto se le suma el cierre de las fuentes de empleo y el aumento en la atención de jóvenes, familias y adultos mayores.

Pastoral de drogadependencia
El entorno de la pobreza genera, a su vez, realidades que han recibido el nombre de “nuevas formas de pobreza”, como el problema del consumo problemático de sustancias que llega a destruir personas, familias y hasta comunidades. Las causas de su extensión y penetración en todos los rincones del país son muchas, y afectan a gran cantidad de personas sin importar la edad, situación social o ubicación geográfica.

Las personas con adicciones son generalmente hermanos que viven en condiciones de vulnerabilidad y que sufren muchas veces situaciones de discriminación, al tiempo que viven con dolor al ver cómo se desmorona su vida y sus afectos, por la imposibilidad de superar una adicción que los consume, a pesar de sus múltiples esfuerzos. “Ellos necesitan de nosotros porque no pueden salir adelante solos, no podemos ser indiferentes frente a su necesidad de integración”, afirman.

Los voluntarios de las Cáritas de los barrios más pobres fueron los primeros en entender que había que dar una respuesta comunitaria a este problema y entonces comenzaron a tejerse redes que llegaron a enlazarse con el trabajo impulsado por la Pastoral de la Drogadependencia. Así, en pocos años, llegaron a integrarse más de 150 centros barriales para el abordaje pastoral y comunitario de las adicciones en todo el país, que brindan apoyo y acompañamiento directo a unas 23.000 personas, principalmente jóvenes.

El abordaje pastoral y comunitario de las adicciones busca reintegrar a estas personas, creando espacios de contención para que puedan generar vínculos que les permitan salir adelante. Los centros barriales trabajan con profesionales de muchas disciplinas: psicólogos, médicos, expertos y voluntarios. Para tener una dimensión del trabajo que realiza Cáritas en todo el país, a través de sus voluntarios y centros barriales de todo el país, pueden verse los videos con testimonios publicados con ocasión de las Colectas de este año y del año pasado.

Un camino para superar la pobreza
Desde Cáritas entendemos que el camino para superar la pobreza en todas sus formas, demanda trabajar juntos por el bien común, dejando de lado intereses particulares, promoviendo a las personas, educando a los niños y jóvenes, promoviendo la cultura del trabajo, tendiendo redes solidarias para contener a los excluidos.

“Nuestra experiencia junto a los más pobres nos da fuerza y esperanza. A lo largo y a lo ancho del país vemos como muchas comunidades se organizan creativa, popular y solidariamente para enfrentar las profundas necesidades: apertura de comedores y merenderos barriales, espacios educativos, iniciativas solidarias de prácticas del trabajo, emprendimientos comunitarios, entre otras”.

“Todas las expresiones de fe popular hablan de que en el Pueblo está viva la esperanza”, sostienen. Como lo dice el lema de la Jornada Mundial de los Pobres de este año: “La esperanza de los pobres nunca se frustrará”.+