Tras la JMJ, 50.000 jóvenes celebraron un encuentro vocacional
1 de agosto, 2013
Río de Janeiro (Brasil)
Como broche final de la Jornada Mundial de la Juventud de Río de Janeiro, más de 50.000 jóvenes llegados de 70 países se dieron cita en el Centro de Congresos en el encuentro vocacional del Camino Neocatecumenal. La convocatoria fue hecha por Kiko Argüello, iniciador de este movimiento eclesial, quien comenzó haciendo un repaso por las tentaciones que impiden a las nuevas generaciones dar sentido a su existencia, explicó que "vivir para ti mismo es horrible porque no puedes darte. Los cristianos por el bautismo tenemos dentro vida eterna y podemos amar en esta dimensión". Al final del encuentro invitó a aquellos que se sentían llamados a responder al Señor, se pusieron en pie unos 3.000 jóvenes dispuestos a entrar en el seminario y unas 2.500 chicas con vocación a la vida consagrada y a la evangelización.
Como broche final de la Jornada Mundial de la Juventud de Río de Janeiro (JMJ), más de 50.000 jóvenes llegados de 70 países se dieron cita en el Centro de Congresos en el encuentro vocacional del Camino Neocatecumenal.
La convocatoria fue hecha por Kiko Argüello, iniciador de este movimiento eclesial, quien comenzó haciendo un repaso por las tentaciones que impiden a las nuevas generaciones dar sentido a su existencia. Explicó que "vivir para ti mismo es horrible porque no puedes darte. Los cristianos por el bautismo tenemos dentro vida eterna y podemos amar en esta dimensión".
En referencia a la JMJ destacó que "los jóvenes del mundo entero han hecho estos días un canto: que la Iglesia está viva, que están con Jesucristo frente a los conflictos, la crisis... ustedes son una palabra de esperanza verdadera".
Además, Argüello resaltó el papel de los laicos a partir del Vaticano II y agradeció al papa Francisco su deseo de "volver al Concilio y confiar en una nueva renovación de la Iglesia".
Al final del encuentro invitó a quienes que se sentían llamados a responder al Señor. Se pusieron en pie unos 3.000 jóvenes dispuestos a entrar en el seminario y unas 2.500 chicas con vocación a la vida consagrada y a la evangelización.
Una de las máximas preocupaciones de Kiko Argüello es la situación que vive el continente asiático, especialmente China, donde se precisan más de 20.000 sacerdotes para responder a las necesidades de los católicos del continente. De ahí que muchos de estos jóvenes sean destinados a esta región.
El encuentro estuvo presidido por el arzobispo de Río, monseñor Orani Tempesta y cinco cardenales: el arzobispo de Viena, Christoph Schönborn; el de Cracovia, Stanislaw Dziwisz; el de Boston, Sean O´Malley; el de Sidney, George Pell y el de San Pablo, Odilo Scherer. Asistieron también 75 obispos y arzobispos y numerosos catequistas itinerantes de esta iniciación cristiana de adultos.
Los peregrinos más numerosos fueron los que llegaron desde el propio Brasil, y de los Estados Unidos, Italia y España.+