Los prelados adhirieron a la iniciativa de la comunidad de Buenaventura, la localidad del Pacífico colombiano azotada por la violencia de las bandas criminales y mafiosas que dominan la región.
El obispo de Bangassou, en el sudeste de la República Centroafricana, monseñor Juan José Aguirre, pidió rezar por la paz y el fin de la violencia en la región.
En una ceremonia de oración ecuménica realizada en la Catedral Metropolitana el jueves 12 de noviembre, se rezó por la paz duradera en Armenia y en Artsaj, dos días después de concluir con un acuerdo.
Presidida por el arzobispo de Buenos Aires, cardenal Mario Poli, será mañana a las 18. Se rezará por una paz duradera en ambas naciones, a raíz de la disputa por el enclave de Nagorno Karabaj.