Sábado 2 de noviembre de 2024

El papa exhortó a los jóvenes a realizar "la revolución del servicio"

  • 21 de noviembre, 2018
  • Ciudad del Vaticano
"La fuerza de los jóvenes, la que puede cambiar el mundo y puede desbaratar los grandes poderes de este mundo es la ?revolución? del servicio", dijo el papa Francisco en el videomensaje ?difundido hoy por la Oficina de Prensa de la Santa Sede- enviado a los jóvenes con motivo de la XXXIV Jornada Mundial de la Juventud que tendrá lugar en Panamá en enero de 2019.
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La Oficina de Prensa de la Santa Sede difundió hoy, el videomensaje enviado por el papa Francisco a los jóvenes con motivo de la XXXIV Jornada Mundial de la Juventud que tendrá lugar en Panamá del 22 al 27 de enero de 2019 y cuyo tema es: "He aquí la sierva del Señor; hágase en mí según tu palabra".

Por su parte el Dicasterio para los laicos, la familia y la vida explicó que el mensaje del Santo Padre a los jóvenes en preparación de la JMJ 2019, que se celebrará en Panamá, difundido hoy, día de la celebración de la Presentación de la Santísima Virgen María, concluye un ciclo de tres mensajes marianos dedicados a los jóvenes en camino entre la JMJ 2016 y la JMJ 2019.

Por primera vez, el Mensaje del Santo Padre se publica en forma de videomensaje para que pueda llegar al mayor número de jóvenes y responder a su deseo, expresado durante el reciente proceso del Sínodo, de comunicarse con la Iglesia a través de formas más cercanas a su lenguaje.

En su discurso, el Santo Padre se dirige a todos los jóvenes del mundo, creyentes y no creyentes, animándoles a descubrir los valores característicos de la juventud. Reconoce su disposición a ponerse al servicio de los demás y los invita a poner en práctica esta actitud desde la perspectiva cristiana.

El mensaje de video sirve como instrumento de preparación espiritual para la próxima JMJ Panamá 2019 y también como inspiración para la pastoral juvenil en todo el mundo.



Videomensaje del Santo Padre
Queridos jóvenes:

Nos aproximamos a la Jornada Mundial de la Juventud, que se celebrará en Panamá el próximo mes de enero y tiene como lema la respuesta de la Virgen María a la llamada de Dios: «He aquí la sierva del Señor; hágase en mí según tu palabra».

Sus palabras son un "sí" valiente y generoso. El sí de quien ha comprendido el secreto de la vocación: salir de uno mismo y ponerse al servicio de los demás. Nuestra vida solo encuentra significado en el servicio a Dios y a los demás.

Hay muchos jóvenes, creyentes o no, que al final de una etapa de estudios muestran su deseo de ayudar a otros, de hacer algo por los que sufren. Esta es la fuerza de los jóvenes, la fuerza de todos ustedes, la que puede cambiar el mundo; esta es la revolución que puede desbaratar los grandes poderes de este mundo: la "revolución" del servicio.

Ponerse al servicio de los demás no significa solamente estar listos para la acción, sino que también hay que ponerse en diálogo con Dios, en actitud de escucha, como lo hizo María. Ella escuchó lo que el ángel le decía y después respondió. De ese trato con Dios en el silencio del corazón, se descubre la propia identidad y la vocación a la que el Señor llama; esta puede expresarse en diferentes formas: en el matrimonio, en la vida consagrada, en el sacerdocio? Todas ellas son modos para seguir a Jesús. Lo importante es descubrir lo que el Señor espera de nosotros y ser valientes para decir "sí".

María fue una mujer feliz, porque fue generosa ante Dios y se abrió al plan que tenía para ella. Las propuestas de Dios para nosotros, como la que le hizo a María, no son para apagar sueños, sino para encender deseos; para hacer que nuestra vida fructifique y haga brotar muchas sonrisas y alegre muchos corazones. Dar una respuesta afirmativa a Dios, es el primer paso para ser feliz y hacer felices a muchas personas.

Queridos jóvenes: Anímense a entrar cada uno en su interior y decirle a Dios: ¿Qué es lo que quieres de mí? Dejen que el Señor les hable; ya verán su vida transformada y colmada de alegría.

Ante la inminente Jornada Mundial de la Juventud de Panamá, los invito a que se preparen, siguiendo y participando en todas las iniciativas que se llevan a cabo. Les ayudarán a ir caminando hacia esta meta. Que la Virgen María los acompañe en este peregrinaje y que su ejemplo los anime a ser valientes y generosos en su respuesta.

¡Buen camino hacia Panamá! Y, por favor, no se olviden de rezar por mí. Hasta pronto". +