El obispo de San Francisco, monseñor Buenanueva, presidió la misa en la catedral local, en la que participaron alumnos, docentes y personal en general de las 4 instituciones de Fasta en la diócesis.
"Ese es el camino de la libertad más auténtica", planteó el obispo de San Francisco, y destacó que Jesús encarnó el amor más grande, el que nos invita a vivir y que anima la vida de tantas personas.
El obispo de San Francisco sostiene que Dios "está empeñado en que demos fruto" y anima a dejarse podar, para que ese fruto sea abundante.
El obispo valoró la predicación de la hermana María Luz y, además de una vivencia personal, citó testimonios de los sacerdotes que participaron de esa instancia espiritual.